Centauros de Portuguesa se convirtió en candidato a llevarse el título de la Superliga de Baloncesto (SLB) antes de la mitad del torneo. Durante el transcurrir del mismo continuaron ganando y gustando, a pesar de no terminar como líderes de la ronda regular. Su primer desafío en postemporada no fue sencillo, pues se extendió al último encuentro, aunque éste lo ganaron con contundencia. En semifinales se verán con Spartans Distrito Capital, el gran favorito, pero al que con seguridad pueden enfrentar de tú a tú.
La evolución de Centauros
Casualmente Spartans, contrincante en semis, fue el primer rival de Centauros en la SLB. Los portugueseños no ganaron, pero estuvieron a punto. El partido se definió en tiempo extra, y los caídos erraron 19 tiros libres. Para aquel entonces, la plantilla no contaba con Kelvin Peña, Héctor «Pepito» Romero, Jesús Tovar y César «Oso» Silva.
Mucho ha cambiado desde entonces. Más allá de las mencionadas adiciones, el equipo mejoró con el pasar de los días, como era lógico. La idea del profesor Óscar Silva se puede ver reflejada en la cancha. El teamwork es quizás el mejor de la competición.
Existe mucha sincronía entre los jugadores: movimientos coordinados para despistar al rival y generar espacio en ofensiva. Salida rápida cuando es necesario. Aprovechamiento del alto/bajo en demasía, siempre buscando la ventaja. Excelente desempeño en las jugadas de saque, con las que castigaron en repetidas ocasiones a Supersónico de Miranda en cuartos de final. Es un equipo que tiene todo para triunfar.
Playmakers, triples y juego interno
La defensa de Centauros es decente, buena. Pero su mayor virtud, el poderío al que todos deberían temer, es la ofensiva. Tienen muchos jugadores con habilidades específicas para el tipo de ataque que el entrenador desee aplicar en determinado momento del partido.
Un día puede estar hecho para que un jugador se encargue de hacer todo, en otro pueden explotar la pintura, o también podrían hacer sufrir al rival con triples. Y cuando mejor están, surge la mezcla de estos tres factores, la cual es casi imbatible.
En Michael Flores y Kelvin Peña recae la responsabilidad de destrabar al equipo si la ofensiva no fluye. Son muy buenos en el 1vs1 y pueden cambiar un partido si se lo toman para ellos.
Luis Bethelmy, José Materán, Jesús Tovar, César Silva, «Pepito» Romero y el propio «Pollito» Peña pueden abrir la cancha y lanzar triples sin piedad.
En la pintura, Romero y Jesús Rodríguez conforman un tándem especial, ayudados por el «Tsunami» y por Flores, capitán del equipo, quien también puede postearse y jugar de espaldas al canasto.
Para situaciones especiales no es descabellado pensar en la opción de Edgar Lugo (6/14 en C3, 42% de acierto), un graduado con honores en el arte de los tiros a larga distancia. Luis Moreno, José Bracho y Heberth Bayona pueden expandir aún más la rotación si Óscar Silva lo desea.
Experiencia y juventud
De la rotación que usó Silva en el tercer partido de la serie contra Supersónicos de Miranda, seis jugadores tienen 30 o más años. Tres tienen 39 o más años. Los otros dos restantes (Materán y Rodríguez) tiene 24 y 26 años respectivamente. Bracho (22) y Moreno (19) también vieron minutos en la serie.
Los «caballos viejos» siguen siendo dominantes en el baloncesto sudamericano, e incluso europeo. Cuando el reloj marca la hora de la verdad, el recorrido y la calidad de los más experimentados dice presente. Además, toda la camada de Centauros luce en excelente forma física, lo cual es la clave de todo.
Equilibra un poco la balanza la energía aportada por los jóvenes mencionados. Marca la diferencia que no sea un equipo exclusivamente de jugadores con mucha experiencia o de solo jóvenes.
Por esto, Centauros de Portuguesa es un rival a batir. Sin hacer ruido en el inicio, se reforzaron y conformaron una plantilla envidiable. Son una realidad. La serie contra Spartans parece ser una final adelantada entre dos conjuntos con mucho poderío y con mucha profundidad. Este sábado inicia la guerra.
Escrito por: Jorge Fernández / @SirGeorgeF.
Foto: Superliga de Baloncesto.