Este viernes se definió la final de la Copa del Mundo FIBA 2023. Los europeos barrieron a los norteamericanos: Serbia dominó a Canadá de principio a fin; y Alemania superó a Estados Unidos en un partido de alto voltaje. Así, el trofeo viajará de Asia al Viejo Continente al igual que cuatro años atrás con el título de España en China 2019.
Serbia no encontró freno ante una «inexperimentada» Canadá
La ofensiva balcánica fluyó como en casi todo el torneo. Los de Svetislav Pesic fueron comandados nuevamente por Bogdan Bogdanovic, de 23 puntos, 3 asistencias y otra jornada efectiva en cada línea (8/12 TC; 3/4 3PT y 4/5 TL) a la par de la referencia interna Nikola Milutinov (16pts/10reb).
«No defendimos a nadie», fue la conclusión del entrenador español Jordi Fernández, que tomó el timón del barco canadiense semanas antes del torneo, luego de la derrota 95-86. RJ Barrett lideró el ataque (23pts) y Shai Gilgeous-Alexander fue reducido por la defensa rival a solo ocho tiros, si bien terminó con 15 unidades y 9 asistencias.
Esta fue la mejor participación histórica en la cita para el elenco más norteño de América. No acudían a una semifinal en evento intercontinental desde los Juegos Olímpicos de Los Angeles 1984, y regresarán a la cita olímpica en París 2024 luego de una ausencia de 24 años (Sídney 2000).
Serbia disputará su segunda final en el certamen después que se desintegrara Yugoslavia y empezara a competir bajo su propio nombre -primero como Serbia y Montenegro-. Tras el subcampeonato de 2014 y la plata olímpica de Río 2016 -ambas caídas ante EE. UU.- volverán a pelear por un valioso oro.
Alemania aguantó el ritmo de los siempre candidatos
Al término del primer tiempo, el score tenía un punto arriba a los estadounidenses (60-59) en un partido de alto ritmo y eficacia por ambos lados. Alemania logró equiparar fuerzas aprovechando los pareos favorables y supo anotar por todos lados con Dennis Schröder (17pts, 9ast y un tiro que liquidó) como principal generador.
Daniel Theis (21pts), Franz Wagner (22pts) y el máximo anotador Andreas Obst (24pts), de gran tercer cuarto que ganaron 35-24, fueron las otras grandes figuras de la gesta germana que los clasificó a su primera final de un Mundial. No jugaban un partido decisivo de una justa desde la derrota en la final del Eurobasket 2005 frente a Grecia.
Los de Steve Kerr llegaron a estar 12 abajo en el último cuarto. Descontaron de la mano de Anthony Edwards (23pts) hasta ponerse a un triple de distancia, pero no pudieron voltear la pizarra y volvieron a quedarse sin el título mundial tras el séptimo puesto de 2019. Buscarán regresar al podio contra Canadá y defender el oro olímpico en París 2024.
Segunda final entre europeos en el Siglo XXI
Contando Mundiales y Juegos Olímpicos, solo hubo una definición entre equipos europeos en este siglo y se dio en la Copa del Mundo 2006 de Japón: España batió a Grecia (70-47) y obtuvo su primer campeonato. En las otras 10 finales siempre estuvo presente Estados Unidos (7) o Argentina (3).
Escrito por: Santiago Aceituno R / @SantiAce23
Foto: FIBA