Cada ser humano tiene días que sencillamente quisiera borrar de su memoria, hacer como si jamás hubiesen ocurrido y seguir adelante. Adbert Alzolay tuvo una de esas jornadas este domingo, cuando igualó su apertura más corta de la presente temporada en el Dodger Stadium.
El diestro, apenas en su segunda presentación desde salir de la lista de incapacitados, trabajó solo tres episodios, en los que fue vapuleado con cinco imparables y seis carreras (cuatro limpias), otorgando tres boletos y ponchando a la misma cantidad de rivales.
«Para ser honesto, esta aparición en particular quisiera tirarla a la basura y continuar«, le comentó Alzolay a MLB.com posteriormente. «En mi opinión, no hubo puntos positivos. Mi cuerpo estaba completamente fuera de ritmo y no pude enmendarlo. Tengo que seguir adelante y enfocarme en la siguiente».
Esta fue la segunda oportunidad en la presente zafra en la que el oriundo de San Félix recibía la asignación de medirse a los campeones defensores; sin embargo, en la ocasión inicial el 5 de mayo, los resultados fueron muy distintos, pues Alzolay toleró solo tres incogibles y dos carreras en cinco capítulos sobre el ruedo, en los que además pasó por la guillotina a siete rivales y regaló apenas un pasaporte.
Su mánager coincidió en el diagnóstico:
«Simplemente no estaba fino. Parecía como que su control era inexistente«, indicó el dirigente de los Cachorros, David Ross. «Es posible que todo su ritmo en general haya estado ausente y eso llevó al comando esporádico. Su slider tampoco parecía tener mucha vida. Estaba batallando consigo mismo allá afuera y jamás pudo encontrarse», añadió.
A pesar de dichos inconvenientes, el criollo aseguró que sus problemas previos con ampollas no tuvieron nada que ver con los pésimos resultados del domingo. De los 29 swings que realizaron los toleteros californianos ante sus pitcheos en la faena, solo tres no conectaron con la pelota.
«Me sentía bien en general. Sencillamente no pude encontrar mi ritmo durante el juego. Siento que mi cuerpo estuvo demasiado lento hacia el plato. Lancé todo lo que tenía, pero jamás encontré el ritmo», sentenció.
Luego de 13 aperturas en lo que va del torneo, Alzolay registra una efectividad de 4.55, con un WHIP de 1.10, al mismo tiempo en que ha recetado a 70 contrarios en 65.1 innings laborados.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: AP.
