El momento siempre es difícil de asimilar. Cuando un veterano, estrella en su momento, se ve en la necesidad natural de ceder el paso al talento joven y cambiar su rol dentro de un club, es normal que empiece a sentirse un nudo en la garganta. Frank Díaz continúa en medio de ese proceso en la actualidad y posiblemente esté frente a la primera temporada en la que sentirá el ajuste de manera tan radical.
Díaz, de 38 años de edad recién cumplidos, será uno de los peloteros con mayor recorrido en participar en la venidera campaña, que tiene previsto arrancar el próximo sábado 23 de octubre.
Bravos, equipo al que pertenece actualmente y con el que ha disputado la inmensa mayoría de sus contiendas en la liga local, está atravesando por un proceso en el que los protagonistas son jugadores con cierto rodaje, pero todavía considerados jóvenes, tales como Breyvic Valera, Ramón Flores, Dennis Ortega y David Rodríguez.
«Es un equipo que tiene bastante futuro. Lo demostraron en la temporada pasada», le comentó Díaz al departamento de prensa insular este miércoles. «Son muchachos con mucho talento y poder, que han dejado claro que no hay equipo demasiado grande para ellos en esta liga. Han probado que Bravos está hecho para grandes cosas».
A pesar de una pretemporada prácticamente inexistente por diversos problemas, la tropa margariteña se las arregló para finalizar la zafra 2020-2021 con récord en .500 (20-20) e incluso llegaron a estar por momentos en el primer lugar de su división con tan solo algunas jornadas por disputar.
Un desplome en la recta final les impidió obtener la clasificación, pero la franquicia mostró el potencial que los tiene posicionados en la actualidad como una de las escuadras más intrigantes del circuito.
Notable diferencia:
«En 2018, que fui cambiado de Magallanes a Margarita, me tocó jugar con varios muchachos jóvenes. Pero la diferencia esta vez ha sido grande, porque los que he visto practicando ahorita son bastante fuertes y están en condiciones de jugar todos los días. Se ve que están listos«, explicó el veterano.
El toletero valenciano no pudo formar parte de ese conjunto de Bravos de la temporada anterior, por lo que todavía no está del todo claro en cómo encaja su madero en la alineación actual; sin embargo, sea cual sea su asignación, Díaz está preparado para pasar la batuta y colaborar en esta nueva posición.
«Lo más importante para mí es estar aquí y vestir esta camiseta de nuevo. Esperaré a lo que diga el mánager, él es quien va a decidir qué es lo que tenemos que hacer. Si hay que salir de emergente, jugar en el jardín derecho, como designado o primera base, pues ahí voy a estar para lo que sea. Todo con tal de sacar cosas positivas y ayudar a los muchachos», aseguró.
Este año, Díaz retornó a la Liga Mexicana de Beisbol, circuito en el que su nombre ya es bien conocido. Disputó 64 encuentros con los Bravos de León y registró una línea ofensiva de .292/.345/.412, con seis jonrones, 41 remolcadas y un OPS de .756 puntos.
«Fue un año bastante favorable. Hubo cuadrangulares, hubo muchos dobles (11) y soné 71 hits. Creo que quedé segundo dentro del equipo en imparables e impulsadas. Eso me animó mucho a venir con Bravos«, confesó el cañonero. «El año pasado quería venir, pero no se pudo porque mi esposa estaba embarazada. Esta temporada vengo con todas las ganas, porque es un año importante para mí. Estoy muy entusiasmado de volver y lograr ese anhelado campeonato».
Tras la salida de Henry Blanco de la novena hace algunos meses y la imposibilidad de Luis Dorante de asumir las riendas insulares, David Davalillo fue seleccionado como el nuevo mandamás del combinado. Para Díaz, no pudo existir una mejor alternativa.
«Creo que Davalillo será un mánager que le va a brindar una oportunidad a todos. Estoy seguro de que habrá armonía y eso es clave», sentenció.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Prensa Bravos.