El plan de Bravos parecía estar marchando a la perfección durante la actual temporada muerta. El equipo decidió finalizar su relación laboral con el extimonel Henry Blanco, para darle la oportunidad a un veterano de la profesión como Luis Dorante, quien traía consigo un amplió currículum como mandamás en la liga local, así como también en otros circuitos del continente.
Sin embargo, esta semana el conjunto margariteño tuvo que recurrir a su plan B, luego de que Dorante le notificara a la organización que en definitiva no podría cumplir sus compromisos con ellos en la 2021-2022, por presentar algunos inconvenientes de salud.
«Luis nos comentó su situación y lamenta no poder venir este año a Venezuela», señaló Yves Hernández, gerente general de los isleños, en un boletín difundido por el club este martes. «La salud es lo primero y lo apoyaremos en todo. Esperemos que pueda acompañarnos en un futuro cercano«.
Ante tal inconveniente, Margarita contará en el timón con David Davalillo, quien originalmente tenía previsto fungir como coach de banca de Dorante en el venidero campeonato.
«David es el indicado. Ya ha trabajado con Bravos por varios años, así que conoce muy bien al talento que ha venido creciendo, así como también el plan que tenemos actualmente. Confiamos en su capacidad para sacarle el máximo provecho al equipo«, aseguró Hernández.
Una responsabilidad profesional y personal:
Davalillo, parte de la nueva generación de una familia de dirigentes exitosos en el beisbol venezolano, tiene experiencia de cinco campañas como instructor de tercera base dentro de la divisa insular; por ende, esta oportunidad representa un reto tanto del lado profesional, como también desde el punto de vista sentimental, pues se trata de una franquicia que ha confiado en sus habilidades por varios años.
«Estoy muy contento y agradecido. Orgulloso de pertenecer a los Bravos de Margarita«, comentó el nuevo capataz a través del departamento de prensa de la novena. «No tengo palabras para expresar lo que siento de que este equipo y su gerencia hayan confiado en mí y me estén dando la oportunidad de ser mánager en el beisbol venezolano. Me he estado preparando los últimos 10 años para dar este paso, porque siempre ha sido una de mis metas».
Según se informó en el mismo boletín, el cuerpo técnico que acompañará a Davalillo en esta experiencia se irá anunciando con el pasar de los días. Pero más allá de quiénes estarán a su lado dentro del dugout, el capataz está entusiasmado por el grupo de peloteros que saltará al terreno bajo sus órdenes.
«Estos muchachos ya han jugado en el invierno, han estado en doble A y triple A, incluso muchos ya han debutado en Grandes Ligas», dijo Davalillo. «Si usamos esa experiencia con la juventud que tenemos, vamos a hacer un equipo competitivo, como hemos sido en los últimos años; aunque siento que en esta oportunidad será diferente, porque estamos enfocados desde temprano en armar un buen conjunto«, añadió.
En cuanto a continuar la tradición de su familia en la pelota local, Davalillo no escondió la emoción. Su padre, Pompeyo, es sinónimo de la LVBP, mientras que su hermano, Marco, es un múltiple ganador del premio al «Mánager del Año» en el circuito.
«Han sido un ejemplo a seguir, una inspiración. No solo ellos, también está mi tío ‘Vitíco«, recordó el recién nombrado dirigente. «No es fácil seguir esos pasos, esos récords. Mi hermano ha sido ‘Mánager del Año’ en un par de ocasiones y cuando hablas de beisbol en Venezuela, debes nombrar a Pompeyo. Estoy muy orgulloso de ser Davalillo«, cerró.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Bravos.
