A la edad de 40 años, Miguel Cabrera dijo adiós a la Major League Baseball (MLB), donde laboró durante 21 temporadas y se convirtió en el único venezolano en coleccionar, al menos, 3.000 hits y 500 jonrones, cifras que podrían catapultarlo al Salón de la Fama de Cooperstown en corto plazo.
En una entrevista concedida a Larry Lage, periodista de la agencia de noticias AP, después del cotejo dominical que Tigres de Detroit le ganó como anfitrión 5-2 a Guardianes de Cleveland en Comerica Park para cerrar la ronda eliminatoria de la campaña 2023, el bateador designado e inicialista felino aseguró que ser homenajeado por el público de Michigan, Estados Unidos, fue algo mágico.
«Voy a valorar este momento por el resto de mi vida», señaló Cabrera quien antes de su último encuentro en Las Mayores observó cómo 41.135 fanáticos utilizaron cartones especiales para formar la frase «Gracias, Miggy» y rendir honores a un pelotero que consiguió dos premios Jugador Más Valioso -JMV- (2012 y 2013), una Triple Corona Ofensiva (2012), dos galardones Pelotero del Año (2012 y 2013) y cuatro títulos de bateo (2011, 2012, 2013 y 2015) con la franela de los felinos.
Más detalles especiales para Cabrera
A Cabrera, que antes del careo dominical recibió por parte de Detroit unas zapatillas conmemorativas a su carrera en la que disparó 3.174 hits -de los cuales 627 fueron dobles, 17 triples y 511 jonrones-, lo hizo muy feliz el escuchar que sus hijos Isabella, Brisel y Christopher anunciaron sus turnos en el enfrentamiento contra Cleveland.
También le generó emoción cuando sus descendientes, en compañía del mánager rayado A.J. Hinch, lo sacaron del campo tras completar un out sin asistencia en la inicial en el octavo inning, mismo que representó el final de una trayectoria que compartió entre Marlins de Florida -ahora de Miami- (2003-2007) y Tigres (2008-2023). El ya exatleta participó en 12 ediciones del Duelo de Estrellas y se adjudicó siete Bates de Plata. Aseguró que todo el domingo estuvo pendiente de las acciones en su honor, que en más de una ocasión lo hicieron llorar.
«Estaba medio perdido durante el juego porque no me podía concentrar (…) Me dieron la oportunidad de decir adiós a las Grandes Ligas y estoy muy agradecido por todo esto», añadió.
Más frases del mítico slugger
Tras colgar los spikes, Cabrera dejó un average vitalicio de .306, luego de conectar 3.174 incogibles en 10.356 oportunidades, algo que le permitió ingresar a un club muy exclusivo.
Se convirtió en, apenas, el tercer deportista en los anales de la MLB en acabar una trayectoria con porcentaje ofensivo de .300, 3.000 inatrapables y 500 vuelabardas, después de Willie Mays y Henry «Hank» Aaron, dos integrantes del Templo de Los Inmortales, donde el criollo parece estar predestinado.
El maracayero espera disfrutar de su familia durante el resto de 2023 antes de comenzar su nueva función con Detroit para el que prestará sus servicios como asistente especial al departamento de operaciones de béisbol desde 2024. Eso le permitirá mantenerse vinculado a una MLB de la que guardará los mejores recuerdos, entre ellos la conquista de la Serie Mundial en 2003 con Marlins.
«Todas las sorpresas que me dieron en el día de mi jubilación fueron maravillosas. Voy a extrañar mucho estar en el campo, pero me siento muy agradecido de poder disputar 21 torneos en MLB y, sobre todo, por dejar buenos números en el deporte que tanto amo. Gracias por su cariño, estimados fanáticos. Es hora de irme, siempre los llevaré en mi corazón», concluyó.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: Prensa Tigres de Detroit
