Oswaldo Guillén, mánager campeón de la Serie Mundial 2005 con Medias Blancas de Chicago, tratará de mostrar su versión ganadora con Tiburones de La Guaira, club al que dirigirá por segunda vez después de un primer ciclo poco exitoso.
El lunes, a través de un comunicado oficial emanado por la gerencia del club de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), se conoció que Guillén, mirandino de 53 años de edad que tomará las riendas de la tropa litoralense, después del despido del capataz Edgardo Alfonzo y el interinato de David Davalillo. Será el cuarto torneo en el que estará el exinfielder como timonel de Tiburones, tras trabajar en tres en la década anterior.
De acuerdo con estadísticas oficiales de la LVBP, el exinfielder de Chicago no ha logrado una campaña positiva con la escuadra salada, a la que sólo pudo llevar a la postemporada una vez en tres intentos. Eso parece contradictorio para un mandamás que fue el primer extranjero en la historia de la Major League Baseball (MLB) en alzar un trofeo del Clásico de Otoño.
Un arranque prometedor para Guillén
En su primera contienda al frente de Tiburones, la edición 2016-2017 de la LVBP, Guillén tuvo un desempeño prometedor, pues guio al escuadrón a los playoffs, pese a acabar con un récord perdedor de 30-33.
Después de eso no pudo volver a la Fiesta de Enero. En la justa 2017-2018, los escualos acabaron con un balance de 24-34 y figuraron últimos en la tabla. En el torneo 2018-2019, La Guaira exhibió una marca de 28-33 y acabó penúltima.
Bajo el mando de Guillén (Novato del Año de la Liga Americana en 1985 y ganador de un Guante de Oro en 1990, además de integrar tres cuadros Todos Estrellas del joven circuito en su carrera de 16 zafras como pelotero de MLB), La Guaira ostentó una foja de 82-105 en fase regular, una tendencia negativa que aspira a cambiar en su nueva incursión en la LVBP.
La expectativa del capataz de los escualos
Guillén, poseedor de un saldo de 678-617 como mánager en MLB -donde laboró ocho citas, de las cuales siete fueron con Medias Blancas y una con Marlins de Miami-, espera tener éxito en esta etapa pues pretende acabar con la sequía de Tiburones que no se consagra desde el curso 1985-1986, cuando él era el shortstop titular de la agrupación.
«Es muy diferente la situación para mí como mánager si la comparo con la de años atrás en Tiburones. Pienso que esta etapa va a ser mejor, porque veo a un grupo de muchachos comprometidos con la causa. Ya hablé con los peloteros y les dije algunos términos que quería saber de ellos. Noté mucho compromiso con la novena y tomé la decisión de volver a La Guaira«, dijo Guillén, nacido en Ocumare del Tuy, a Aldrym Adrianza, periodista de Canal I, en una videollamada desde Estados Unidos.
«Los Tiburones piensan que yo puedo mejorar las cosas y, de verdad, yo no voy a batear ni a fildear, pero voy a hacer lo posible por ganar. A mí no me gusta perder y voy a empujar (alentar) a los peloteros para que se puedan lograr los objetivos, entre ellos levantar el trofeo de campeón, porque no hay nada más bello para tu carrera que cumplir una meta como esa», agregó el jefe del dugout de La Guaira que afirmó tener mucho respeto por su homólogo Alfonzo, se uniría a los salados el miércoles y aspira a guiarlos a un óptimo nivel sobre el diamante.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: Canal I
