Sin mucho alboroto y debate público, los Reales de Kansas City enfrentan una de las interrogantes más grandes de equipo alguno en la actual temporada muerta. Se trata nada más y nada menos que del futuro de Salvador Pérez con la organización.
El criollo, quien regresó por todo lo alto en 2020 tras perderse toda la campaña anterior con una lesión, entrará el año próximo a su último de la extensión por cinco temporadas y 52.5 millones de dólares que firmó con la divisa en 2017, por lo que el gerente general Dayton Moore deberá decidir en los próximos meses si le ofrece un nuevo pacto al máscara venezolano, intenta cambiarlo a mediados de le venidera zafra o, lo que luce menos probable, lo ve marchar rumbo a la agencia libre.
Pérez se ha establecido como uno de los mejores jugadores de la organización en la última década, y con el retiro del jardinero Alex Gordon este año, el peso de la capitanía del conjunto cayó por completo sobre sus hombros. Asimismo, el valenciano se convirtió en uno de los jugadores favoritos dentro de la afición del club, por lo que la idea de retenerlo sería, posiblemente, la única en ser recibida con brazos abiertos por padre de los fanáticos.
Salvador Pérez firmó un sólido retorno
El sólido retorno del careta en esta pasada temporada también parece indicativo de que los Reales deberían hacer todo lo posible por mantenerlo en sus filas. En medio de la incertidumbre de cuánto podría afectar su rendimiento la cirugía Tommy John a la que fue sometido, “Salvy» respondió con una línea ofensiva de .333/.353/.633 en 37 compromisos, en los que también registró un OPS+ de 161, 11 vuelacercas y 32 carreras remolcadas.
De igual forma, el brazo de Pérez no dio señales de haber quedado comprometido luego del procedimiento quirúrgico y el cinco veces ganador del Guante de Oro no cometió errores defensivos en la recién culminada temporada.
Por su parte, Kansas City no cuenta con un reemplazo inmediato capaz de llenar el inmenso vacío que dejaría la partida de Pérez, quien ha sido el receptor regular de la novena desde 2012. Cam Gallagher y Meibrys Viloria se presentan como las principales alternativas que tendría el equipo sin el carabobeño, y si bien ambos cuentan con buenas herramientas defensivas, sus maderos no parecen estar ni cerca de contribuir al mismo nivel.
No obstante, y por muy controversial que sería la decisión en el seno de su fanaticada, la opción de canjear a Pérez por piezas jóvenes y talentosas que puedan ayudar al equipo en un futuro cercano también es prometedora. El venezolano ha sido uno de los mejores caretas de las mayores desde su arribo al máximo escenario, y luego de probar que está saludable nuevamente, su valor en el mercado está tan alto como nunca antes.
¿Valdrá la pena pagar una costosa extensión?
Kansas City no luce con opción de competir todavía en 2021, por lo que Moore deberá tomar en consideración si vale la pena pagar una costosa extensión a Pérez que, según ha quedado demostrado históricamente, cubriría sus años de declive como pelotero. El criollo cumplirá 31 años de edad en mayo y el librito sugiere que, una vez en el tercer piso, los receptores disminuyen considerablemente su rendimiento y sus cuerpos comienzan a pasarles facturas por las exigencias de la posición.
Buster Posey, Brian McCann y Matt Wieters son todos ejemplos recientes de caretas exitosos que perdieron un gran porcentaje de su valor en el terreno tras llegar a los 30 años de edad. Pérez acumula más de 900 juegos detrás del plato en su carrera.
Entre tantos conjuntos que tendrán temporadas muertas de mucha reflexión, los Reales no se quedan atrás. La decisión de retener o no a Salvador Pérez impactará significativamente el futuro a corto y largo plazo de la organización, y el momento de lanzar los dados es ahora.
Andrés Espinoza Anchieta / @AndresEspinoza
Foto: @losreales