Por lo general, cuando un grupo de personas ha estado separado por varios meses y uno de los compañeros reaparece mucho más delgado y en mejor condición física general al momento de la reunión, una sensación de alegría y satisfacción reina sobre el resto; sin embargo, cuando Avisaíl García llegó a los entrenamientos primaverales de los Cerveceros con 20 libras menos, había algo de preocupación en el clubhouse.
«Dijimos: ‘Oh Dios, veamos si todavía puede batear cuadrangulares«, le comentó el lanzador, Freddy Peralta, a MLB.com sobre la reacción del equipo.
García, que supera el metro y los 92 centímetros de estatura, nunca ha sido un gran jonronero en las mayores, pero sí ha sido reconocido por golpear la bola con bastante contundencia en sus 10 años como ligamayorista. Además, en seis de esas campañas ha logrado marcar doble dígito en el renglón de estacazos, por lo que sus muestras de poder están lejos de ser una anomalía.
A pesar de la preocupación de sus compañeros en Milwaukee, el oriundo de Anaco estaba seguro de que su cambio de apariencia únicamente lo beneficiaría. Este martes, en el primero de una doble cartelera entre Cerveceros y Cachorros en Wrigley Field, con el mismo Peralta como abridor por parte de los lupulosos, García acabó por completo con las dudas de sus colegas.
«Lo está haciendo. Para mí, se está viendo mejor. No se cansa tan rápido y es increíble. Es muy bueno para él», indicó Peralta tras el desafío frente a los oseznos, que terminó con victoria de Milwaukee con pizarra de 4-2.
Pionero en casa:
En dicho desafío, el jardinero sacudió un bambinazo de dos carreras que viajó a una distancia de 457 pies, de acuerdo a las proyecciones de Statcast. El vuelacerca fue el vigésimo de la presente contienda para García, lo que le permitió convertirse en el primer jugador en sacudir esa cantidad de cañonazos con el uniforme de los Cerveceros este año.
El torpedero Willy Adames, quien también se fue para la calle en ese cotejo, tiene 21 bombazos en 2021, pero solo 16 de esos llegaron con Milwaukee, que lo adquirió vía cambio proveniente de Tampa Bay hace un par de meses.
«Trabajé muy fuerte en la temporada muerta», explicó García, quien se enfocó en dejar atrás un pálido estreno con la organización el año pasado, cuando ligó para .238 de promedio, con .659 de OPS y apenas dos jonrones en 53 duelos. «Perdí mucho peso. Esa es la manera en la que puedes sobrevivir en las Grandes Ligas. Sigues trabajando duro y tratas de hacer lo mejor en cada juego. Me siento orgulloso», agregó.
Los 20 vuelacercas también le permitieron a «Avi» igualar una marca personal de bambinazos en una zafra. El patrullero cerró con esa misma cifra su torneo de 2019, cuando todavía formaba parte de los Rays.
En exactamente 100 juegos disputados en lo que va de año, García conecta para .266 de promedio, con un OPS de .804 puntos. Mientras la bola viajaba al otro lado de la barda el martes, el criollo descargó un alto nivel de frustración que surgió a raíz de un error defensivo que tuvo lugar tres días atrás.
El guardabosques dejó caer un elevado que hubiese significado el final del compromiso de esa jornada frente a los Gigantes. En su lugar, San Francisco igualó las acciones y terminó llevándose la victoria en entradas extras.
«Por supuesto que me sentí mal por eso. Somos humanos, cualquier cosa puede ocurrir. Nadie quiere cometer errores o perder. Estamos aquí para ganar. Debemos seguir adelante», expresó.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Cerveceros.