Ronald Acuña Jr. se convirtió este 2023 en el primer atleta que coleccionó 41 jonrones y 73 bases robadas de manera simultánea en un curso de la Major League Baseball (MLB) y aunque eso lo convierta en una amenaza latente para los lanzadores en los playoffs, el jardinero de Bravos de Atlanta está más concentrado en tratar de contribuir a la producción de su club que se mide con Filis de Filadelfia en la Serie de División de la Liga Nacional.
La llave está igualada 1-1 tras la celebración de dos encuentros en Truist Park, hogar de Bravos que fue blanqueado 3-0 en el duelo 1 por los cuáqueros y se desquitó en el Juego 2 al revetir un 4-0 para imponerse 5-4. Ese lauro tuvo una gran influencia del venezolano que anotó dos de las cinco rayitas de una escuadra que parece despertar de un largo letargo.
«No estábamos dormidos (al hablar acerca de Atlanta que no marcó en los primeros 14.0 innings del cruce al mejor de cinco topes frente a Filadelfia), simplemente Filis tiene un gran pitcheo y eso complica bastante las cosas. Pienso que pudimos reaccionar y eso es lo importante. Lo que hay que dejar claro es que voy a hacer lo que sea para embasarme y darle opción de hacer carreras a mi club. Eso será clave para triunfar», explicó Acuña Jr. a medios estadounidenses en una entrevista concedida antes de viajar de Atlanta a Filadelfia, donde este miércoles se reanudará la confrontación del viejo circuito.
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El guardabosque de 25 años de edad, reserva de Tiburones de La Guaira en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), promedió .337 en la ronda regular del torneo, pero en esta postemporada falló en sus primeros cinco turnos.
En vista de esta repentina sequía de cañonazos, el criollo se enfoca en negociar bases por bolas, para estar en circulación, al punto de que lo hizo en un par de ocasiones y eso le permitió conseguir un hurto y un par de marcadas en la batalla contra Filadelfia. Se exige a sí mismo el ser catalizador de la ofensiva de Bravos, que busca ser monarca de la Serie Mundial por segunda vez en tres campañas.
«Pienso que debo hacer mi trabajo y el primero de ellos es ponerme en circulación, bien sea con boletos o por cualquier otra forma. La idea es darle chance a mis compañeros de producir», añadió el outfielder que el lunes recibió un bolazo en el octavo tramo, algo que precedió a un jonrón del antesalista estadounidense Austin Riley que le dio la ventaja 5-4 a Bravos, misma que no perdió para apuntarse la victoria y garantizar la realización de un cuarto desafío.
Celebraciones peculiares
Aunque en esta Fiesta de Octubre, Acuña Jr. todavía no depositó la bola en las gradas por primera vez, los seguidores de Bravos, al igual que los cronistas deportivos norteamericanos, esperan que lo haga pronto para presenciar sus singulares celebraciones, pues incluyen un choque de manos con el coach de la antesala, Ron Washington, y una serie de movimientos con las manos que simulan el gusto por los platos italianos.
En medio de risas, algo que caracteriza al atleta patrio que fue Novato del Año de la Liga Nacional en 2018 y ahora pretende ser Jugador Más Valioso (JMV) de la Liga Nacional, explicó por qué festeja cada estacazo de esa manera.
«Yo nunca sé lo que va a pasar, sólo saludo a Wahisngton y todo lo demás sale sólo. Lo que más disfruto es el momento en el que saco la pelota, porque hago buenos swings y en Grandes Ligas conseguir jonrones no es fácil», agregó el patrullero que recordó que Ja Morant, base de Grizzlies de Memphis en la NBA, lo insipiró a gozar sus buenos desempeños sobre el diamante.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: MLB
