“Me sentà ciclista de nuevoâ€. Con esa frase resumió Juan Belandria lo que significó volver a entrenarse al aire libre luego de 48 dÃas de confinamiento por el coronavirus. El corredor reside en la Comunidad Valencia, España, desde hace dos años y medio. Allà defiende los colores del equipo Netllar Telecóm Alé.
“Sentir el aire libre, disfrutar del paisaje, es realmente una dichaâ€, contó Belandria a Sports Venezuela desde suelo español.
“Hice dos horas de entrenamientos. Rodé por Concentaina, que es donde vivo, y Muro. Culminé con un poco de ascenso, de 3 kilómetros, a un castillo de la zonaâ€, detalló Belandria, oriundo de Canaguá, en el estado Mérida.

Juan Belandria no salÃa a las carreteras valencianas desde el 14 de marzo, cuando el Gobierno español ordenó aislamiento domiciliario para todos los residentes en el paÃs en el intento de frenar el contagio por la COVID-19, que para aquellos dÃas empezaba a cobrar vÃctimas por decenas cada dÃa.
El merideño volvió a ver la luz este sábado gracias a la decisión de las autoridades gubernamentales de España de flexibilizar las medidas de restricción para los ciclistas de competencia. Eso sÃ, debió ajustarse a condiciones de obligatorio cumplimiento para poder ejecutar su faena sin problemas.
“Se nos pidió que rodáramos de manera individual y no en grupo, además de que no tuviésemos contacto directo con otras personas. Asà lo hice, porque enteiendo que es por nuestra seguridad para evitar contagiarse del virusâ€, indicó Belandria.
Casi mes y medio de encierro y rodillos para Juan Belandria
Como buena parte de los ciclistas residenciados en los paÃses donde la pandemia ha golpeado con fuerza, Juan Belandria debió a limitar sus actividades fÃsicas al famoso rodillo,  como se conoce al dispositivo de entrenamiento donde el pedalista encaja su bicicleta para pedalear en un lugar fijo.
En eso estuvo el casi mes y medio de cuarentena obligatoria. “Los primeros dÃas del rodillo fueron difÃciles, pero luego le fuimos tomando el pulso. Era una hora en la mañana y de hora y media a dos después del almuerzo. Desde luego, no es lo mismo que entrenar al aire libre, pero sabÃamos que debÃa ser asÃ, porque lo del virus era serio y no podÃamos arriesgarnos. Fueron dÃas de mucha pacienciaâ€, contó el calapedista de 22 años, quien comparte domicilio con Jatniel Figueroa, otro ciclista venezolano que hace vida en el circuito amateur del pedalismo español.
Para evitar que las jornadas bajo techo fuesen tediosas, el staff técnico preparó actividades por videoconferencias y eso, según dijo el venezolano, ayudó a subir la motivación.
“El equipo siempre ha estado pendiente de todos en la cuarentena. La verdad que se han portado muy bien. Y se han inventando cosas para que mantengamos el ánimo en alto pese a estar en un encierroâ€, destacó Belandria.
El virus frenó de momento sus aspiraciones
Belandria, un ciclista caracterizado por su fuerza en la montaña pero que también se defiende en otros terrenos, habÃa llegado a la temporada 2020 con metas ambiciosas. El año pasado fue cuarto en la clasificación general de los sub23 en la Copa España y procuraba repetir un resultado similar en su primer año como corredor élite.
De hecho, su comienzo de campaña fue destacado y parecÃa ser un auspicio de lo que vendrÃa. En la Vuelta a GuadalentÃn, una de las primeras competencias del calendario, marcó séptimo lugar en la segunda etapa y cerró octavo en la general, mientras que en el Trofeo de Guerrita fue protagonista de una fuga en solitario que acabó a kilómetro y medio de la llegada.
“La verdad que el coronavirus fue inoportuno, porque estaba enfocado en tener una gran temporada y tenÃa buenas sensaciones. Pero es algo que escapa de nuestras manos y lo que queda es esperar a que se solucione este problema y tratar de andar bien cuando vuelvan las competencias. Tengo el respaldo del equipo, somos muy unidos en la plantilla, y sé que serán buenos los resultados cuando vuelva la competenciaâ€, expresó Belandria, quien anhela dar el salto al profesional y seguir el camino de Orluis Aular (Caja Rural, España) y Leángel Linárez (Mortagua Miranda, Portugal), de momento los únicos venezolanos en el máximo circuito del deporte de las bielas.
“El año pasado hubo contacto con un equipo que me ofrecÃa pasar al profesional, pero al final la decisión fue tener un año más de experiencia en el amateur para llegar en mejores condiciones. Espero que sea este año, si se reanudan las carreras, o el que viene, que se cumpla el que es uno de mis sueñosâ€, agregó el merideño.
En agosto se reanudarÃa la Copa España
La Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) planea la Copa España élite y sub23 en el mes de agosto, previendo que para entonces ya la pandemia esté controlada. Belandria ruega que eso realmente ocurra porque extraña las carreras.
“Se dice que en agosto volverÃamos a competencias y espero que sea asÃ, porque necesitamos correr. Aunque debo decir que la cosa sigue fea, pues las carreras en Europa se siguen suspendiendo y parece que no habrá normalidad en el corto plazo. A nosotros nos queda seguir enfocados, atendiendo las instrucciones del equipo y tener pacienciaâ€, señaló.
Por lo pronto, Belandria seguirá disfrutando de esa experiencia de entrenar nuevamente al aire libre, que, ahora más que nunca, valora después de tantos dÃas de confinamiento.
Escrito por Carlos José Méndez / @CarlitosJMendez
Foto: CortesÃa