El Rey se vistió de Mamba en su castillo

El Rey visitó Clevaland con los Lakers y figuró en la victoria 115-108. Lo hizo vestido de Mamba, en la velada pre-aniversario a la muerte de Kobe Bryant.

LeBron James, en su versión más Mamba

LeBron James lideró el triunfo de Los Angeles con 46 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias, 2 robos, 2 tapones, lanzando 17/26 /73%) de campo y 7/11 en 3PT. Es la segunda ocasión que suma más de 45 con la camiseta de los californianos, la última vez, el 18 de noviembre de 2018.

Desde que arrancó la partida empezó con ese ritmo eficaz, y de cantidades, que pocas veces se le ve tan rápido. En el primer cuarto encestó 21, con 4 triples incluidos en cinco intentos. Sólo falló un tiro de 10 en esos 12 minutos iniciales.

Motivado por volver a la arena donde lo draftearon y se convirtió en leyenda con ese título en 2016 tan especial -primero en la historia de los Cavs-, rindió el homenaje perfecto en el luto por el astro fallecido 12 meses atrás.

Con los 46 tantos, es el lagunero más viejo en llegar a dicha cifra, desde el «Mama Out», cuando Bryant se retiró con 60 unidades en su casilla frente al Utah Jazz.

En una semana con varios recuerdos del No. 8 y 24, como la efeméride de los 81 puntos, el día lunes también se cumplió otro hecho, que involucra a, posiblemente, los dos mejores jugadores del siglo XXI hasta ahora. Hace un año, LeBron pasó a Kobe en la lista de máximos anotadores de la NBA, y con eso, el último mensaje del Black Mamba en sus redes sociales: «Sigue moviendo el juego hacia adelante, @KingJames. Mucho respeto mi hermano #33644».

El Rey continúa su legado

James puede estar orgulloso de haber obtenido el título No. 17 de la franquicia, honrando la memoria de quien llevó 5 consigo al Staples Center. Después de la tragedia, era un relato escrito, los Lakers debían conseguir el campeonato en tributo al ídolo de la organización.

Este par nunca se vio en una serie de playoffs, nunca en unas finales de la NBA. Uno de los mayores lamentos para los aficionados de la época. Sin embargo, ahora con el oro y púrpura, el tiempo los ha vuelto a acercar. Ese anillo, con la serpiente en el diseño, los mantiene atados. El destino siempre encuentra la manera de unir a dos estrellas de alguna forma.

Escrito por: Santiago Aceituno R / @SantiAce23

Foto: Lakers

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