Con la salida de George Springer en la agencia libre, los Houston Astros perdieron al que fue su primer bateador durante los últimos cinco años. Ese toletero que se mantuvo constantemente en las almohadillas, aportó velocidad durante sus desplazamientos y aumentó las posibilidades de pisar el plato. Todo indica que José Altuve heredará esa responsabilidad.
Al menos fue lo que dejó entrever Dusty Baker, mánager de los Astros, que entre su filosofía y forma de ver el beisbol, Altuve es el indicado para iniciar la ofensiva del equipo. Después de todo, es uno de los toleteros que más inatrapables soltó durante los últimos años, por lo que garantizarle más oportunidades solamente puede beneficiar al equipo.
“Sigue siendo una obra en progreso, pero me estoy inclinando por Altuve”, analizó Baker a MLB. “Él es bueno. El muchacho puede tener 700 turnos que equivalen 250 imparables. Eso es mucho”.
Quizás las cifras fueron exageradas, pero el concepto no. Pese a su bajo rendimiento de 2019, el camarero es un chocado de pelota por excelencia. Ha soltado 360 inatrapables de 2017, por lo que estar en la parte alta de la alineación garantizará que la pelota estará en juego y el resto del equipo tendrá más chance de remolcar carreras.
Altuve, seis veces convocado al Juego de Estrellas y tres veces campeón de bateo de la Liga Americana, sabe lo que ocupar ese puesto. En el pasado la tomó y destacó, sin embargo, Springer fue el predilecto de tanto de A.J Hinch como de Baker en su primer año.
¿Ayudará a José Altuve el cambio?
Las características ofensivas de José Altuve son bastante claras. Se parará en la caja de bateo e intentará golpear con contundencia cualquier lanzamiento que esté cerca de la zona de strike. Eso no cambiará ni por el estadio, rival o puesto dentro de la alineación.
Sin embargo, con la estructura actual de los Astros, es evidente que Altuve es el más idóneo para ser el abridor. Su velocidad, contacto y habilidad para llegar a las almohadillas, es lo que buscan en Houston. De por vida como primero en el orden, ligó para .315, con OPS de .827 y 33 bases robadas en 381 juegos. Su OBP de .363 es perfecto para esa labor.
Pero esos números, en su mayoría, llegaron cuando mostró su mejor nivel, ese que dentro de los Astros confían que volverá y que ligeramente apareció en la postemporada. Lo cierto es que es todo indica que necesitará retomar su nivel como toletero estrella desde lo más alto del line up sideral.
“Parece que está [más cómodo]”, dijo Baker. “Sabíamos que tendríamos este obstáculo cuando empezamos. No es fácil reemplazar a George, pero no teníamos otra alternativa”.
Escrito por: César Sequera Ramos |@CesarSequera33
Foto: Houston Astros
