La carrera del venezolano Andruw Monasterio es uno de los tantos ejemplos de perseverancia y resiliencia que nos ofrece el mejor béisbol del mundo. El utility de los Cerveceros de Milwaukee nos contó sobre la alegría que siente al estar en un equipo competitivo y que le proporciona muchas oportunidades en diferentes posiciones del juego.
Monasterio esta mañana estuvo practicando en diferentes posiciones previo al tercer duelo de la serie entre los Cerveceros de Milwaukee y los Astros de Houston en el Minute Maid Park, con la particularidad de ver muchos rodados en la primera almohadilla.
Es importante señalar que Andruw aún no se ha estrenado en la primera base en un juego de Grandes Ligas, pero por los vientos que soplan podríamos estar viendo a Monasterio sumar una posición más en su registro individual.
La experiencia de patrullar el jardín izquierdo
Andruw Monasterio tuvo una grandiosa oportunidad en esta temporada en el jardín izquierdo de los Cerveceros de Milwaukee. El venezolano suma dos entradas vigilando el bosque izquierdo en esta campaña y participó atrapando un elevado con una solvencia notable.
«Nunca había practicado en el outfield y me necesitaron en el outfield. Estaba deseando que me dieran una jugada, y me la dieron, un fly ball. Hice la jugada, estaba muy contento porque ese día ganamos. Estaba más contento que cuando debuté», agregó Andruw Monasterio.
También resaltó la importancia de esta experiencia en los jardines porque considera que es una faceta nueva en su carrera que le da una expansión importante, generando mucho más valor.
Un guiño del destino a la constancia
Hay un refrán popular que dice que primero hay que comerse las manzanas verdes para luego disfrutar de las maduras. Este refrán podría reflejar fácilmente la trayectoria de Andruw Monasterio en el béisbol estadounidense.
El utility venezolano jugó nueve años en Ligas Menores y pasó por cuatro organizaciones diferentes. Es uno de esos casos donde el trabajo silencioso y la disciplina habló mucho más que sus números de por vida.
En ese sentido, Andruw Monasterio describió su carrera en Ligas Menores como bien larga. Dándole gracias a Dios por su adaptación, subrayando que siempre supo ser mejor que el día anterior.
«Mi bono no fue algo muy grande cuando firmé. Nunca fui prospecto, pero mi mentalidad fue siempre ser mejor que el día anterior», agregó Monasterio.
Por Juan Gutiérrez | @deportinto
Foto Juan Finol | @finolshoot