No todos los jugadores venezolanos que están en las ligas menores son prospectos cotizados como lo eran en su momento Ronald Acuña Jr., Gleyber Torres o como lo es actualmente Francisco Álvarez. Otros desarrollan sus condiciones sin recibir mucha atención y cuando reciben el ascenso a las mayores pasan desapercibidos. Ese es el caso de Kervin Castro, un joven lanzador de 22 años de edad oriundo de Maracay.
Sin muchas entrevistas ofrecidas ni ser mencionado durante las conversaciones entre los aficionados, Castro se convertirá en el venezolano 439 que juega en las Grandes Ligas. Es un premio que se ganó luego de una actuación en las categorías inferiores que ya era imposible de ignorar por la directiva de los Gigantes de San Francisco.
El lanzador derecho tenía efectividad de 2.86 con 60 ponches y WHIP de 1.20 durante los 44 episodios que había lanzado en Triple-A. Aunque le negociaron 22 boletos, apenas concedió tres cuadrangulares, por lo que se estableció como un relevista dominante dentro de la organización.
Pero fue un estatus que no fue sencillo de alcanzar. Kervin Castro, un receptor convertido, firmó con los Giants por $ 100,000 en julio de 2015. Se perdió dos temporadas profesionales debido a la cirugía de Tommy John y la pandemia de coronavirus, pero se ganó un lugar en el roster de 40 de San Francisco en noviembre después de una demostración impresionante en la liga de instrucción el otoño pasado.
«Lo que creo que es interesante es que está entre los líderes de la liga en varias categorías si se filtra por número de entradas, pero es un valor atípico desde el punto de vista de la edad», dijo Gabe Kapler a MLB sobre el arribo del criollo. “La mayoría de los tipos en esa lista tienen 25, 26 años, a veces 27. Kervin tiene 22. Lo que eso me dice es que realmente se ha mantenido firme y se ha desempeñado bien y las situaciones no parecen enormes para él. Él es capaz de manejar eso sin haber pasado mucho tiempo en los niveles superiores».
Castro no había lanzado por encima de clase-A baja antes de este año, pero abrió la temporada 2021 en Triple-A Sacramento y registró una destacada actuación como apagafuegos en Triple-A. Combina una recta que puede llegar a las 98 millas por hora, con una curva explosiva. Además, el venezolano es conocido por su capacidad para trabajar rápidamente en el montículo.
Kervin Castro, un magallanero que gusta en San Francisco
Son muchos los contratiempos que se han juntado para que Kervin Castro haya tenido un inicio de carrera con poco trabajo. Cambio de posición, lesiones, pandemia y hasta un veto administrativo en contra de su organización en Venezuela.
El serpentinero llegó al profesional como receptor, pero en San Francisco detectaron rápidamente que su futuro era como relevista. Ese cambio seguramente provocó que su codo se lastimara y tuviera que someterse a una operación. Su recuperación fue tardía, por lo que estuvo dos años sin subirse a un montículo durante un encuentro.
Como es común en los lanzadores con una operación Tommy John, el beisbol invernal pudo haber ayudado, sin embargo, Kervin Castro es ficha de los Navegantes del Magallanes en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), razón por la que no pudo jugar en la campaña 2020-2021 por el veto sobre el equipo turco.
Todo eso provocó que el derecho no contara con el trabajo suficiente para mejorar su arsenal como lanzador. Sin embargo, con pocas actuaciones en los entrenamientos primaverales sorprendió al cuerpo técnico de los Gigantes. Ahora recibió el llamado para demostrar su talento en el máximo nivel.
“Castro ha estado impresionante desde el principio, incluso se remonta a las sesiones de bullpen de hace un mes o tal vez menos”, comentó Kapler al Mercury News. “Ha sido muy consistente en los bullpens, muy consistente con la velocidad”.
Escrito por: César Sequera Ramos |@CesarSequera11
Foto: MILB