La fama, talento y dinero son, posiblemente, las primeras tres cosas que vienen a la mente cuando se habla de un jugador de Grandes Ligas. Y si bien forman parte de las características de un pelotero que logra triunfar en dicho nivel deportivo, también hay aspectos menos llamativos que llegan con el estatus, en especial para aquellos que provienen de países distintos a los Estados Unidos.
El alejarse de familiares y amigos durante la mayor parte del año e incluso por mucho más tiempo en el caso de algunos, está de primero en la lista de contras. Luis Arráez, pieza fundamental de los Mellizos de Minnesota desde su estreno en el máximo escenario en 2019, estuvo lidiando con esa separación por tres largos años.
Este viernes, el habilidoso toletero finalmente tuvo la oportunidad de regresar a su hogar, en San Felipe. Pero más allá de retornar a la ciudad donde nació y creció, Arráez estaba de júbilo por volver a abrazar a su madre.
«De regreso a casa después de tres años», escribió el ligamayorista en sus redes sociales, junto con algunas fotos y un video del emotivo momento. «Estoy agradecido con Dos por permitir la reunión con mi familia y en especial con mi mamá. ¡La extrañé mucho!».
¡A palo limpio!
El yaracuyano, de 24 años de edad, arribó al máximo escenario en 2019 y desde el mismo arranque dejó en evidencia su capacidad de batear hacia todos lados del terreno. Arráez finalizó sus primeros 92 duelos con los Mellizos con una línea ofensiva de .334/.399/.439, junto con 20 dobles, un triple, cuatro jonrones, 28 fletadas y un OPS de .838.
Al año siguiente, con un calendario recortado de forma considerable por la pandemia, la «Regadera» volvió a culminar en el potro de los .300 puntos de promedio (.321), con nueve conexiones de dos bases, 16 anotadas, 13 impulsadas y .364 de OBP.
Y a pesar de que este año el criollo no pudo hilar una zafra más con .300 de average – se quedó corto en el intento al ligar para .294 – de igual forma se mantuvo como una pieza de mucho valor para el timonel Rocco Baldelli, no solo con el madero, sino también gracias a su versatilidad defensiva.
Los planes exactos del paleador venezolano son desconocidos por el momento, pero todo parece indicar que tendrá por lo menos unas merecidas semanas de vacaciones con su familia, antes de regresar a los Estados Unidos y comenzar su preparación rumbo a los venideros entrenamientos primaverales.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Luis Arráez en Twitter.