Morgan Ensberg se unió la noche del martes a Caribes de Anzoátegui y, de inmediato, tomó las riendas del club de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) con el que debutará como mánager en circuitos caribeños, algo que lo emociona.
El estadounidense -otrora antesalista de Astros de Houston, Padres de San Diego y Mets de Nueva York en la Major League Baseball (MLB)– conversó con Antonio «Tony» Mérola y Eduardo Acosta, periodistas de La Tribu Oriental, y confesó que su única intención es ser un buen capataz, algo que logrará si el equipo logra buenos resultados en una campaña 2024-2025 que arrancará el viernes con el duelo inaugural entre Tiburones de La Guaira y Navegantes del Magallanes en el estadio Universitario de Caracas.
«Yo sólo deseo ser un buen entrenador y la razón por la que estoy aquí (en Venezuela) es porque quiero ser grande», dijo con profunda convicción el norteamericano, de 49 años de edad, al pisar territorio anzoatiguense.
Experiencia de Ensberg
Ensberg, primer extranjero que dirigirá a La Maquinaria Indígena desde el torneo 2020-2021 cuando lo hizo el cubano Mike Álvarez que llevó a la tropa a conquistar su cuarto y último título de la LVBP, cuenta con experiencia como mandamás en Ligas Menores (MiLB).
Fue dirigente de la sucursal Clase A Fuerte de Astros entre 2017 y 2018, y luego se encargó de la filial Doble A de Mantarrayas de Tampa Bay. En 2024, estuvo al frente del elenco Triple A de la organización de Florida.
Al comparar la era que le tocó vivir como jugador (en los 2000) con la que ha experimentado como jefe del dugout (entre 2010 y 2020), afirmó que el béisbol ha cambiado y que hay que adaptarse a las nuevas tendencias, con el fin de alcanzar éxitos con regularidad, algo que pretende hacer con Caribes que no pudo acceder al Round Robin en los dos certámenes anteriores.
«Cuando yo laboré (en Grandes Ligas) no había tanta información disponible como la que hay ahora (gracias a la sabermetría). Es una era diferente porque los beisbolistas son más atléticos. Sé que los bateadores y lanzadores son mejores, pero hay algo que los atletas que han trabajado en Estados Unidos deben aprender (en la LVBP) y es saber cómo aplicar distintas estrategias. Mi meta será hacer que mi personal entienda bien mi filosofía, con el fin de dejar al club en la mejor posición posible para triunfar. Esa siempre será la idea», explicó Ensberg quien fue integrante del Equipo Todo Estrella de la Liga Nacional en 2005 cuando prestó sus servicios para Houston con el que disputó y perdió la Serie Mundial de ese curso ante Medias Blancas de Chicago, dirigido por Oswaldo Guillén.
Buenos recuerdos de Venezuela
Ernsberg se siente feliz por estar en Venezuela, pues conoce al país ya que fungió como tercera base de Leones del Caracas en los 2000.
Recuerda que en los campos patrios se «respiraba un ambiente único», caracterizado por la alegría de los fans, algo que lo hace pensar que esta nueva experiencia será una oportunidad ideal para reecontrarse con el «calor de los amantes de la pelota latinoamericana».
«Lo que más rememoro de mi primer paso por Venezuela es la felicidad que manifestaban los fanáticos en cada uno de los encuentros. Vi mucha gente bailando en las tribunas y eso es único. Ellos son muy ruidosos y eso genera un gran ambiente para los choques», agregó el piloto de los aborígenes quien aspira a que tanto peloteros como coaches de la novena porteña se mantengan en una misma línea, con el fin de conseguir los lauros que permitan que la agrupación sea aspirante al gallardete.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: Prensa Caribes de Anzoátegui
