El nombre que más llamó la atención del público cuando salió la convocatoria del primer módulo internacional de la selección nacional femenina absoluta, en Italia, fue el de Sonia O’Neill. La mediocampista nació en Canadá, su padre es irlandés y su madre en venezolana. Ella milita en el Fleury 91 (primera división de Francia) y el primer mensaje que le mandó sus padres en la concentración fue: «Este equipo (la Vinotinto) me hace amar el fútbol otra vez».
La volante llegaba a su primera concentración con el combinado patrio con el aval de haberse formado en una universidad de Estados Unidos, marcar esta temporada en la Champions femenina y un considerable recorrido en Europa.
Noruega (Husqvarna), Italia (Roma y Bari), Croacia (Split) y Francia (Fleury) son los paÃses que están en su curriculum. «El módulo superó mis expectativas, no pudo haber sido mejor», comentó O’Neill.
Detalles de la primera concentración
Uno de los aspectos que más impresionó a la mediocampista fue el respeto y buena relación entre la entrenadora (Pamela Conti), el cuerpo técnico y las jugadoras. Asimismo afirmó que disfrutó mucho las sesiones de trabajo. «Dejé este módulo motivada para mejorar en mi fútbol y mi castellano [risas]», reveló la futbolista, que se integró de muy buena forma con el grupo.
«Han pasado pocos dÃas y ya extraño a las chamas [risas]. He jugado en muchos paÃses y esta es la primera vez que me siento realmente bien acogida por todas. Me sentà en casa con estas chicas».
La volante aclaró que la ayudaron en la adaptación y vio que el objetivo de todas no es mejorar “para ser una estrellaâ€, sino para crecer en conjunto y ayudar a la Vinotinto. «Soy honesta cuando digo que el módulo estuvo lleno de energÃa positiva y risas todo el tiempo», añadió.
En medio la camaraderÃa y buena quÃmica está el sentimiento de pertenencia y de compromiso.
«Para mà estar en la Vinotinto es una gran oportunidad y responsabilidad. No solo me represento a mà o a mi familia, es a todo un paÃs (…) Cada vez que estoy entrenando en Francia, pienso en Venezuela y en que necesito hacer todo lo posible para dar lo mejor para los venezolanos, para el equipo y para hacer historia».
¿Qué puede aportar Sonia O’Neill?
Pamela Conti dio indicios de la posición en la que jugará Sonia O’Neill. “Me puso a jugar de ‘5’ u ‘8’ en el mediocampo. La profesora espera que mantenga la posesión y asegure estar conectada con el equipo, en especial, cuando defendamosâ€, explicó. También describió a Conti como una “entrenadora increÃbleâ€. Señaló que a lo largo del módulo trabajaron mucho la concentración e hicieron mucho énfasis en la táctica.
Cuando se le consultó sobre lo que puede aportar, expuso: «Varias personas me han dicho que tengo una gran visión de juego, inteligencia táctica, fuerza y técnica». La mediocampista reveló que está enfocada en su dieta y estado fÃsico para llegar mejor a cada módulo.
El camino a la Vinotinto
La futbolista de 25 años nació en Toronto, pero reveló que su madre la puso en contacto con sus raÃces venezolanos desde pequeña. Asà como la gran mayorÃa de futbolistas, creció jugando con niños.
A los 17 años obtuvo una beca para jugar en Estados Unidos y de ahà di el salto a Europa. «Salir de casa cuando era joven me ayudó a madurar y a convertirme en profesional rápidamente», analizó.
En su club están contentos por su convocatoria y se une en al grupo de compañeras internacionales con sus selecciones, ya que comparte con futbolistas que representan a Dinamarca, Francia y Camerún. El objetivo de la atleta está claro: «Queremos hacer historia y competir en la Copa del Mundo de 2023. Con nuestro talento y buen trabajo, no tengo dudas que lo podamos lograr».
Escrito por: Prensa Femenino FVFÂ / @SeleVinotinto
Foto: AS ROMA y Prensa FVF.