Si existe una faceta que está dentro del juego de Eugenio Suárez son los cuadrangulares. Son parte de su producción y, quizás, la principal vía para ayudar a los Cincinnati Reds desde que se estableció como pelotero titular. Sin embargo, recientemente atravesaba una de las peores sequías jonroneras de su carrera.
Afortunadamente, Suárez salió de esa mala recha durante el encuentro entre los Reds ante los D-Backs de Arizona. El campocorto conectó su tercer vuelacerca de la campaña y el primero desde el pasado 10 de abril, acumulando 41 turnos al bate sin soltar un batazo de vuelta entera.
Hasta que el lanzador de Arizona, Taylor Widemer, se equivocó con la ubicación de una recta. La dejó en la zona de poder del venezolano y la castigó con contundencia. Nadie dentro del estadio dudó que iba a abandonar el parque.
Y existen pocas formas de salir de una larga cadena de juegos sin vuelacercas que un estacazo imponente. La pelota abandonó el madero de Eugenio Suárez a 110.2 millas por hora y recorrió 441 pies de distancia, siendo el estacazo más largo desde el que sonó el 15 de septiembre de 2019, según la periodista Sarah Langs.
Eugenio Suárez cerró la jornada de 5-1 con una anotada y dos carreras remolcadas en un encuentro en el que David Peralta se llevó todos los focos. Sin embargo, el promedio de bateo del venezolano todavía es bajo: .169, cifra que muestra los contratiempos que ha tenido al momento de hacer contacto constante con la pelota.
Su conexión hizo creer a los Reds, pero Arizona consiguió la victoria 14 a 11.
Eugenio Suárez necesita acelerar para cumplir su deseo
Antes de iniciar la temporada, Eugenio Suárez aspiraba a terminar con 50 cuadrangulares en la campaña. Deseaba ser el primer venezolano con una cantidad de estacazos en un año, algo que luce poco probable en este momento.
“Este año, mi meta es romper mi propio récord”, dijo Suárez. “Creo y siento que será una temporada especial para mí. Voy por 50 jonrones. No sé si lo voy a lograr o no, pero voy por 50”.
La proyección actual tiene a Suárez con 27 jonrones, algo que se mantiene como un número respetable para un toletero de poder, pero que se quedará corto con las aspiraciones del criollo. No obstante, con una racha de las que acostumbra a conseguir, podría acercarse al valor que desea.
Mejorar su contacto será el principal objetico. Los números tienen que Eugenio Suárez tiene problemas para golpear los envíos quebrados y eso le afecta en su producción. Con unos ligeros ajustes podrá retomar la producción de extrabases.
“Para mí, fue más duro porque mi familia no estaba conmigo. Quería a mi familia de vuelta, quería ese apoyo y quería el apoyo de los fanáticos”, dijo Suárez el miércoles. “Cuando ves hacia atrás, no tuve un buen año. No me siento feliz con la temporada pasada. Hablo de mí, no del equipo. Llegamos a los playoffs y todo eso. Pero yo soy mejor que eso. Yo no soy un bateador de .200”.
Escrito por: César Sequera Ramos |@CesarSequera33
Foto: Cincinnati Reds