El ciclista merideño Eduin Becerra se proclamó campeón de la Vuelta al Táchira 2025, una resonante conquista que alcanza a sus 39 años, tras sortear sin problemas el recorrido de la octava y última etapa, el tradicional circuito Santos Rafael Bermudez, en las avenidas España y 19 de Abril de San Cristóbal, y ratificar su liderato en la clasificación general.
La porción de clausura, de 117 kilómetros y que finalizó en peralte del velódromo J.J. Mora, registró el triunfo de Brandon Rojas, integrante de un cuarteto que se marchó en fuga desde las primeras pedaleadas. Con su accionar, Rojas evitó que Colombia se fuese con las manos vacías de la edición 60 de la ‘Vuelta Gigante de América’.
El cafetero cubrió la distancia con tiempo de 2 horas, 42 minutos y 35 segundos. La selección Colombia hizo uno-dos, después que Jefferson Ruiz entrara segundo y más atrás, tercero, lo hiciese el venezolano Kevin Roa.
Mientras los escapados se jugaban todas sus cartas por la alegría parcial, en la parte posterior, escudado por sus compañeros del Team Trululu-Grupo La Guacamaya, Becerrra se dedicó a completar los kilómetros del segmento, un trámite que cumplió sn sobresaltos para levantar el trofeo de campeón. Finalmente, el casaca amarilla ingresó de 11, como parte del paquete principal, que llegó con déficit de 1:29.
Aunque el perfil del circuito de cierre, con tramos de ascenso, se prestaba para intentar algún movimiento, particularmente de los pedalistas Jorge Abreu y José Alarcón, que secundaban al líder Becerra a una corta diferencia (22 segundos y 1:05 respectivamente), prevaleció el pacto de caballeros, a sabiendas de que el merideño, que dio una demostración de su fortaleza el día previo, en la trepada a Cerro El Cristo, donde ganó y amplió ventaja, era un hueso duro de roer.
Los registros históricos guardan un antecedente cercano de un corredor que perdió liderato y título en este circuito. Ocurrió en 2009, con José Alarcón en rol de víctima de una ‘emboscada’ de Lotería del Táchira que derivó en la coronación de Ronald González.
Aquella vez, Alarcón llegó al último día sin equipo que lo respaldara y poco pudo hacer para evitar el golpe lotero. En el caso de Becerra, todo lo contrario. El de Santa Cruz de Mora forma parte de la formación más completa del giro que acaba de concluir y con gregarios de lujo como Roniel Campos.
Colombia animó la etapa final
Con el título de la general (Becerra) y la montaña (Ángel Rivas) decididos en el monumento Cristo Rey, la etapa final (10 vueltas al trazado) tenía como punto de interés la batalla por la clasificación de los sprints y, desde luego, el triunfo en la meta.
En el apartado de los premios intermedios de velocidad, Gregory Guevara, protagonista en las primeras jornadas, llegaba con una ligera oportunidad de desbancar a su coterráneo Edwin Torres. El de PoliTáchira tenía 22 puntos por 30 del lotero.
Sin embargo, Guevara estuvo desprevenido cuando se formó la fuga del día y quedó sin posibilidades.
Cuatro corredores saltaron del grupo principal prácticamente desde el momento en que se bajó la bandera a cuadros. Colombia, que no había ganado ninguna fracción, mandó a tres de los suyos en la escapada: Rojas, Ruiz y Arroyave. El venezolano Roa era el cuarto integrante de la aventura.
Sin que significasen preocupación alguna para Becerra, los fugitivos recibieron libertad e incluso rodaron con una ventaja superior a los tres minutos.
Al final, un colombiano, Brandon Rojas que dejó la rueda de su compatriota Ruiz, ganó la última etapa de la Vuelta, como sucedió el año anterior con Alejandro Osorio, aunque el vecino país sigue sin quebrar la extensa racha de no ver a uno de sus escarabajos coronarse en Táchira, vigente desde 2007, por intermedio de Hernán Buenahora.
Una fuga puso a Becerra camino al título
El Team Trululu-La Guacamaya (Trujillo) había llegado a la Vuelta al Táchira 2025 con Roniel Campos como jefe de filas. El tricampeón había dado señales de su buen estado físico al ganar una etapa en el Clásico Bramón.
Pero el escenario cambió con la fuga que se armó durante la tercera etapa, con final en Ciudad Bolivia. Aquel día, un velocista, Arlex Méndez, pasó primero bajo la bandera ajedrezada, y Becerra dio el primer paso hacia el título.
En una interesante apuesta táctica, Alexis Méndez, director deportivo del Trululu, puso en la escapada a Becerra, a sabiendas de que eliminaba de la carrera por la corona a su estrella (Campos), pero también dejaba fuera de la pelea a Juan Ruiz, del equipo rival Gobernación de Trujillo y que para muchos era el hombre a vencer.
En esa jornada, Becerra entró a la meta como parte de un grueso número de corredores (19) que llegaron en escapada, con ventaja de dos minutos y 20 segundos sobre un pelotón que dejaba a Campos y Ruiz como grandes damnificados.
Así las cosas, Becerra quedó como primera opción de su equipo. Su técnico le otorgó plena confianza y el merideño respondió con creces cuando le tocó asumir su parte de la misión en terreno de montaña. Asumió el liderato en La Grita y lo ratificó un día luego en El Cristo.
El tiempo del monarca en la general definitiva
Becerra se llevó la corona con tiempo global de 20 horas, 11 minutos y 8 segundos para los 1.187 kilómetros de recorrido en ocho días, por delante de Abreu (0:22) y Alarcón (1:05).
Se trata de su séptima presencia en el top10 del giro andino. Fue subcampeón en 2022, tres veces quinto (2009, 2013 y 2023) y sexto en dos ocasiones (2012 y 2017).
Viene a ser el segundo ciclista con más edad en alzar el trofeo de campeón en la prueba por etapas predilecta de los venezolanos. Lo logra con 39 años y cuatro meses, mientras que el colombiano Hernán Buenahora lo hizo con 39 años y diez meses.
«Ganar una Vuelta al Táchira es algo que no tiene comparación. Se luchó mucho y gracias a Dios se logró. Todo el agradecimiento a mi equipo, a los técnicos, a los empresarios. Se trabajo bien para llegar a esto», señaló Becerra tras su coronación, no sin antes lanzar un mensaje motivacional: «Prepárense y luchen por sus sueños, tarde que temprano llega el sueño».
Así se cerró el capítulo del giro andino, tras ocho etapas y con un campeón inédito, que sucede en el palmarés a ecuatoriano Jhonatan Caicedo.
Por Carlos José Méndez
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