Pablo Favarel: «Trabajamos desde el día uno para ser el número uno»

Spartans Distrito Capital se preparó para ganar la Superliga de Baloncesto. Fue su único objetivo desde que se confirmó su participación en el torneo… y no falló en el camino. La pieza clave que forjó a un equipo unido y con carácter se llama Pablo Favarel. El coach argentino tuvo la oportunidad de debutar como entrenador en jefe y lo hizo de forma soñada: ganando de principio a fin (18-2).

A la cantidad de conocimientos que durante el paso del tiempo ha almacenado le inyectó una generosa dosis de energía, y al mezclarse, conformó a un entrenador perfecto para la ocasión. El torneo era muy corto, por lo que el tiempo para corregir era mínimo. Y las figuras eran muchas, por lo que hacía falta más que táctica para hacerlos ver bien en el tabloncillo.

Favarel siempre mantuvo el orden en el grupo. Y como él mismo comentó post-partido, «aunque algunas veces no jugábamos de la mejor forma, el carácter y el corazón siempre estaban». Razón no le falta, sus palabras las avala Pedro Chourio, por ejemplo, así como el resto de jugadores. En la duela se podía notar con facilidad. Muchos partidos se decidieron en los últimos minutos, y en casi todos salieron airosos.

La reflexión de Pablo Favarel

Enérgico en la línea lateral, sobrio frente a un micrófono. Pablo Favarel agradeció a todos aquellos que hicieron posible la realización de la Superliga de Baloncesto, y que además lo ayudaron en el camino para convertirse en entrenador.

«Trabajamos desde el día uno para ser el número uno«. Esta es una frase que pudiese parecer cliché, pero que es muy cierta. En las oficinas comenzó el trabajo, que como nos refleja el resultado final, fue impecable. Spartans siempre estuvo arriba, nunca bajó su nivel. Considerando el contexto en el cual se disputó el torneo, sin pretemporada, lograrlo era complicado. Solo con buen trabajo era posible.

Concluyó con una gran verdad, que generalmente no nos detenemos a analizar cuando evaluamos el desempeño de los miembros de un equipo: en el deporte, la mayoría de veces se pierde, no se gana. Pablo Favarel ganó en su primera experiencia.

Él se considera un afortunado, pero con algo de osadía podemos atrevernos a ir más allá de la suerte; para ganar se requiere de muchas virtudes que él demostró tener. Su futuro en los banquillos ilusiona a Argentina, cuna de exitosos guías. Quizás la fortuna, en este momento, es que la selección de Venezuela cuente con él en su cuerpo técnico.

Escrito por: Jorge Fernández / @SirGeorgeF.
Foto: Superliga de Baloncesto.

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