Un par de refuerzos provenientes de aguas lejanas llegaron al Estadio Universitario este sábado, con la finalidad de sumarse a la pretemporada de los Tiburones. Uno colaborará desde el dugout, mientras que el otro prestará sus servicios dentro de las líneas de cal.
Rigoberto Beltrán, quien fue contratado por la divisa a mediados de año para que cumpla las funciones de coach de pitcheo, y el infielder Luis Avilés Jr. dijeron presente en el Coso de Los Chaguaramos en el sexto día de entrenamientos para los escualos.
Avilés Jr., de 26 años de edad, viene de registrar una línea ofensiva de .234/.285/.465, con 15 dobles, un triple, 15 bambinazos, 46 impulsadas y 12 bases robadas en 67 desafíos entre las categorías doble A y triple A de los Angelinos en 2021.
«Me sentí bastante bien. Desde que llegué al clubhouse pude ver la emoción de los muchachos, con la música y una muy buena comunicación», comentó el toletero de raíces cubanas mediante el departamento de prensa litoralense. «Eso me hizo sentir como en casa. No me sentí como un extraño en ningún momento«, agregó.
Primer interescuadras:
Además de realizar su rutina habitual de entrenamientos, que incluyó tomar práctica de bateo y agarrar rodados en la segunda y tercera base, Avilés Jr. también quiso lanzarse directo a la candela y participó en el primer juego interescuadras de La Guaira hasta ahora.
«Gracias a Dios el equipo se estaba preparando hoy (sábado) y jugamos un encuentro simulado. Agarré un par de turnos en los que me sentí bien, porque quería ver pitcheos de una vez. Le dije al cuerpo técnico que me pusieran a batear para incorporarme y alistarme lo más posible rumbo al día inaugural», explicó.
Mientras tanto, Beltrán tuvo la oportunidad de echar un primer vistazo a parte de los serpentineros con los que estará trabajando en el venidero torneo, aunque el mexicano aseguró que ha venido estudiando al equipo desde hace un tiempo.
«Tuvimos muy buenas conversaciones con Dennis Malavé (mánager) antes de venir para acá», indicó el exgrandeliga. «Llegué con una buena visión y preparado».
Sin embargo, a pesar de que su misión esencial es guiar a los lanzadores, el veterano instructor se tomó el tiempo de observar el desempeño de todos los jugadores del conjunto en este encuentro inicial.
«Tuvimos nuestro primer juego interescuadras y la energía que se demostró me hizo sentir emocionado por el inicio de la temporada. Los brazos que vimos fueron bastante buenos, la defensiva lució muy bien y los receptores llamaron un buen juego. Creo que tenemos una buena base para dar la pelea, tener una campaña exitosa y ganar el campeonato«, agregó.
Junto a ellos, el infielder venezolano Carlos Herrera también se sumó a los entrenamientos. En 87 compromisos entre las sucursales clase A Avanzada y doble A de los Angelinos este año, Herrera conectó para .261 de promedio, con 25 dobles, siete bambinazos, 37 fletadas y 18 bases robadas.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Prensa Tiburones.