“No quiero ser una distracción para los Medias Rojas en su intento de seguir adelante”. Esa frase fue parte de la declaración de Alex Cora en el comunicado que difundió la tropa de Boston tras acordar su separación laboral del boricua el pasado mes de enero, luego de que este fuera revelado como partícipe y mente maestra detrás del escándalo del robo de señas de los Astros en 2017.
Tan solo 10 meses después de dicha declaración, Cora está de vuelta al mando de los patirrojos rumbo a la venidera temporada de las Grandes Ligas.
¿En dónde está la veracidad en aquella frase? Claramente nunca existió. ¿O es que nadie va a estar hablando de Cora y su pasado cuando Boston salte al terreno de juego para los entrenamientos primaverales de 2021? ¿Nadie se cuestionará la legitimidad de cada victoria que consiga el club el año próximo?
El legado del puertorriqueño quedó manchado de forma permanente, y sin importar si dejó o no atrás sus mañas, será una distracción para cualquier conjunto que dirija de ahora en adelante y más aún cuando ha habido tan poco tiempo para sanar heridas.
Cora no es el único
La buena noticia para Cora es que no estará solo en el club de los que regresan de la suspensión de tres meses, pues tal como fue anunciado hace unos días, A.J. Hinch, mánager de aquel equipo de Houston de 2017 del que Cora fue coach de banca, acordó con los Tigres de Detroit para comandar su divisa en la próxima campaña.
Mientras cientos de valiosos scouts a lo largo de la liga se quedaron sin trabajo debido a los cortes económicos de los equipos por el impacto de la pandemia, Cora y Hinch tienen empleo nuevamente como si nada hubiese ocurrido.
Varios agentes libres, con casi toda seguridad, tendrán problemas para encontrar nuevas organizaciones por los problemas que ha venido afrontando la gran carpa con dicho mercado, pero Cora y Hinch estarán tranquilos en sus oficinas.
Ni las consecuencias de la pandemia, ni los problemas del mercado de agentes libres, es culpa de Cora y Hinch. Sería ridículo culparlos por algo así, pero son temas dignos de mencionar para evaluar lo injusto que puede llegar a ser este negocio y la vida en general.
MLB con mano floja
Allí es cuando el béisbol debería tomar medidas como ente encargado de limitar lo más posible las injusticias. Sí, ambos implicados cumplieron sus sanciones, pero desde un principio estaba muy claro que los castigos no parecían ser lo suficientemente severos para la falta cometida. Claro que ante la inmunidad recibida por los peloteros de los Astros, cualquier regaño a alguno de los participantes serviría de “por lo menos».
Ante los ojos de Cora y Hinch, esta sanción sirvió para demostrar lo mucho que los necesita el béisbol. Apenas 30 minutos después de terminada la Serie Mundial 2020, Detroit estaba contactando al extimonel de Houston. Y Boston pasó por encima de varios candidatos interesantes para tomar las riendas del equipo, que al final parece que sirvieron solo de maquillaje para quien siempre fue el elegido de la directiva.
De acuerdo a un reporte del USA Today, los Medias Blancas prefirieron sacar del retiro a Tony LaRussa antes de realmente considerar a alguno de los castigados como posible dirigente de su club. Y eso es justamente lo que uno esperaría de una organización con principios y que comprenda la magnitud de la operación ilícita que estos dos individuos encabezaron.
Sin importar lo que consigan Hinch y Cora en sus nuevas etapas como dirigentes, el hecho de que dos organizaciones tomaran la decisión de perdonarlos con semejante rapidez es vergonzosa y envía un mensaje equivocado de lo que la liga debería representar.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta /@AndresEspinoza
Foto: MLB