Ethan Salas, receptor venezolano que acaparó la atención al recibir en enero un bono de 5.6 millones de dólares por firmar con Padres de San Diego para comenzar su carrera en Ligas Menores (MiLB), ya se estrenó en Clase A y despertó el interés de los fanáticos de los clérigos al tener una buena actuación ofensivo.
A sus 17 años de edad, el nativo no mostró miedo al momento de pararse en el plato con la casaca de Tormenta de Lago Elsinore, filial de San Diego en la Liga de California y, al menos, en sus primeros cuatro choques demostró ser un bateador con potencial de astro, pues mantuvo un average de .364 tras sonar cuatro hits en 11 turnos. Eso lo dejó bastante satisfecho.
“No sentí nervios. He estado en escenarios más importantes: entrenamiento de primavera de Grandes Ligas, mi debut en la pelota de invierno con Águilas del Zulia, así que entré bastante relajado. Simplemente lo hice como si fuera cualquier otro encuentro”, señaló el sábado el joven criollo en una entrevista concedida al departamento de prensa de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP).
Más números de Salas
Salas, quien es considerado como una verdadera gema de Venezuela por los clérigos, todavía no empujó carreras en MiLB, pero sí consiguió buenos números en otras áreas, algo que ilusiona a los seguidores de Padres que aspiran a que se convierta en pelotero de la Major League Baseball (MLB) en corto plazo.
Acumuló un doble y tres anotadas, además de un porcentaje de embasado (OBP) de .588, uno de cojines alcanzados (slugging) de .455 y un OPS (suma de los dos rubros previos) de 1.043.
Aspira a aprender los secretos para convertirse en un buen beisbolista y considera que lo logrará mientras tenga garantizada la titularidad.
“Simplemente salgo y juego tan duro como puedo, y realmente no presto atención a nada más. Quiero decir, esta es mi vida y deseo estar en el campo por mucho tiempo».
Una convicción para el cátcher
Salas, quien en ocasiones ha actuado como bateador designado, pretende escalar el resto de los niveles de la MiLB para cumplir su anhelo de transformarse en deportista de la MLB.
Va por buen camino, pues actúa en Clase A luego de no participar en la versión Rookie, algo que demuestra que posee mucho talento para la disciplina de las bases y bates.
Aspira a concretar su meta de convertirse en una figura del Big Show y se esforzará al máximo para cumplir su sueño y, sobre todo, responder a la confianza de los sacerdotes que le dieron la bonificación más alta para un atleta nacido en Venezuela.
«Esto es lo que hago las 24 horas del día, los siete días de la semana y cada vez que estoy ahí, en el diamante, trato de laborar como si fuera el último partido. Solo estoy aquí para divertirme y ganar”, concluyó.
Escrito por: Joseph Ñambre | Twitter: @JosephSports27
Foto: MiLB
