Ezequiel Tovar, campocorto titular de Rockies de Colorado en la Major League Baseball (MLB), es practicante del positivismo, porque piensa que esa es la única manera de obtener buenos resultados en los diamantes.
Para el pelotero, nacido hace 22 años en Maracay, Aragua, forma parte del colista de la División Este de la Liga Nacional y cree que para que su equipo abandone esa posición necesita que el resto de sus beisbolistas entiendan que se deben proyectar como ganadores, una mentalidad que a su entender es esencial para salir de los slumps colectivos.
“Soy muy positivo. Incluso en la derrota trato de ver las cosas buenas que pasan. Siempre trato de mantener una mentalidad positiva y buscar las cosas interesantes para extraer aprendizajes de los juegos”, explicó a Thomas Harding, periodista de MLB.com, tras una práctica en Estados Unidos.
Una luz para Colorado
Colorado, que antes de la tanda del lunes tenía una marca de 12-28, ve en Tovar a la piedra angular de su proyecto de reconstrucción, que aspira a concretar a mediano plazo. Hasta ahora, el torpedero respondió a esas expectativas de la directiva, porque dejó números respetables para un chico que afronta su tercera contienda en Las Mayores y por el que algunos analistas consideran que están en pleno crecimiento.
Mantuvo un average de .266 en sus primeros 39 choques, tras batear 42 hits en 158 turnos, incluidos nueve dobles, un triple y cuatro jonrones. Empujó 15 carreras y anotó 16. Parece ir encaminado a lograr su segundo torneo con doble dígito de bambinazos, tras sacudir 15 en 2023, y para concretar ese anhelo planifica incrementar su capacidad de contacto.
“El béisbol es un deporte de ajustes y tengo que seguir haciéndolos, para incrementar mis registros ofensivos. Si quiero materializar ese anhelo, debo hacer lo que aprendí desde que era un niño y es trabajar. Si estoy en un slump, necesito aumentar mi capacidad de contacto porque así saldrán los batazos que permitirán acabar con los malos momentos».
Más números de Tovar
Tovar es dueño de porcentajes de embasado (OBP), almohadillas alcanzadas (slugging) y OPS (sumatoria de los dos rubros anteriores) de .308 .411 y .719, respectivamente. Esos guarismos confirman su estatus de astro en pleno desarrollo y justifica por qué la gerencia rocallosa le dio extensión de contrato por siete campañas y 63.5 millones de dólares.
El aragüeño sabe que tanto él como sus compañeros deben alcanzar su máximo potencial como deportistas para sobresalir en la exigente MLB y por ese motivo, centrará sus esfuerzos en inspirar al resto de la novena de Denver a esforzarse al máximo en pro de agilizar el proceso de maduración, indispensable para encarar y superar a elencos talentosos.
De hecho, Brenton Doyle, jardinero de Rockies, comparte la filosofía del maracayero y quiere apoyarlo en la tarea de motivar a los atetas a evolucionar tanto ofensiva como defensivamente.
“Tenemos que tener mucha fe en cada uno de nosotros y eso es importante para conseguir nuestros objetivos. Sabemos que cuando nos apoyamos, las cosas buenas pasan y procuraremos mantener esa actitud para ser más exitosos”, indicó Doyle.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: MLB