Las lesiones son parte del juego, como es bien conocido; sin embargo, para Miguel Cabrera se han hecho mucho más frecuentes de lo normal en los últimos años. A pesar de un arduo trabajo de preparación durante el invierno, el futuro inmortal no pudo evitar sucumbir ante un nuevo percance físico a comienzos de este año, aunque la buena noticia es que su proceso de recuperación está cerca de culminar.
Cabrera, quien fue colocado en la lista de incapacitados hace varios días por una molestia en el bíceps izquierdo, tenía previsto realizar swings en la jaula de bateo este martes, y en caso de no presentar inconvenientes posteriormente, el siguiente paso sería tomar práctica de bateo en vivo a finales de esta semana, según reportó el Detroit News.
El 11 veces All-Star, que cumplió 38 años de edad el pasado domingo, disputó siete compromisos con los Tigres antes de sufrir el percance físico. En ese lapso, Cabrera conectó tres imparables en 24 turnos oficiales (.125 AVG), con un jonrón, dos anotadas y tres remolcadas.
Asimismo, el maracayero regresó a cubrir la primera almohadilla en cuatro de esos encuentros, algo que no hacía desde 2019. Si bien el dirigente A.J. Hinch se había comprometido durante la primavera a alinear a «Miggy» como inicialista por lo menos un par de veces a la semana en esta temporada, será interesante ver si el mandamás mantendrá el mismo plan tras esta lesión del toletero.
En caso de que la evolución del triplecoronado siga por el buen camino, es posible que Cabrera pueda ser activado en algún punto de este fin de semana, tal como asomó Hinch el pasado sábado.
A punto de pasar a otra página histórica:
Una vez de vuelta, el dos veces MVP retomará su batalla por alcanzar los 500 cuadrangulares de por vida en la gran carpa. Cabrera llegó a esta contienda a solo 13 bambinazos de unirse al selecto club, y en la misma jornada inaugural comenzó a recortar camino con un recordado vuelacercas ante Shane Bieber en medio de una nevada en el Comerica Park.
De igual forma, Cabrera también continuará su marcha hacia los 3.000 incogibles, un camino un poco más largo, pero que también resulta a su alcance para finales de este año. Con su trío de hits en estas primeras de cambio de la presente zafra, el astro llegó a los 2.869; es decir, 131 cohetes lo separan de la anhelada marca.
En 19 años como ligamayorista, el cuatro veces campeón bate registra una línea ofensiva de .313/.390/.539, con un OPS de .930 puntos.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Tigres.