El Liverpool ganó su partido correspondiente, en la visita del West Ham, a la séptima fecha de la Premier League ayer 2-1. Por segunda vez consecutiva, lo hizo con una remontada. Pero no dependía de si mismo para quedarse con la punta solitaria en el campeonato inglés.
Domingo ideal para el Liverpool
Aunque suene raro, los Reds celebraron las derrotas del Aston Villa y el Everton, sus perseguidores más cercanos. Ni el Chelsea, Tottenham, Arsenal y los conjuntos de Manchester -tienen un juego menos- han podido acechar muy de cerca a los dirigidos por Jürguen Klopp.
Los villanos también tienen un compromiso por disputar. Si sumaban de a tres hoy y en la fecha pendiente, eran dueños de la cima. Dependían de ellos y no lograron mantener el ritmo con el que empezaron. Esa goleada a los campeones defensores hace un par de semanas queda muy lejos de los mostrado en las últimas dos derrotas. 3-0 vs Leeds y 3-4 vs Southampton, ambas de local.
Carlo Ancelotti, por su parte, empieza a sufrir las consecuencias de un plantel corto. James Rodríguez, lesionado, y Richarlison, suspendido, no estuvieron presentes en la caída frente al Newcastle.
Diogo Jota: Refuerzo que da puntos
Cuando se discutía sobre quién sería el refuerzo de la temporada, que fueron muchos, en Inglaterra, poco se habló de Diogo Jota. El portugués llegó desde el Wolverhampton a cambio de 40 millones de euros, los cuales se pagarán en varias cuotas. Ya suma tres goles en cinco partidos. En su mayoría, entrando desde el banco. Los últimos dos sirvieron para darle el triunfo a su equipo estando 1-1.
Jota le ha inyectado aire al ataque de Anfield. Ese tridente ofensivo que dominó el continente lleva tres campañas en el más alto nivel, y de a ratos, parecieran necesitar frescura en sus ideas y en lo físico. Klopp incluso los ha hecho jugar juntos a los cuatro. El extremo de 23 años ha tenido un impacto inmediato en su llegada y promete darle muchas alegrías a este club en el futuro.
Escrito por: Santiago Aceituno R / @SantiAce23
Foto: Liverpool
