Real Madrid hizo los deberes en Alemania al rescatar un empate 2-2 en su visita al Bayern Múnich en la ida de las semifinales de la Champions League.
Vinicius Jr. salvó al Real Madrid
Vinicius Jr. evitó que el cuadro bávaro celebrase la victoria ante los poco más de 75 mil espectadores que colmaron las gradas del Allianz Arena para presenciar el primer ‘round’ de un clásico europeo que, dicho sea de paso, estuvo a la altura de las expectativas.
El astro brasileño anotó los dos goles del cuadro merengue. El segundo de ellos llegó desde el punto penal, a siete minutos del final, para pulverizar la ventaja del cuadro anfitrión y provocar una igualdad en el marcador que deja la definición de la llave pendiente para el careo de vuelta, en la capital española.
Todo el mundo presagiaba un duelo entre los ingleses Harry Kane y Jude Bellingham, pero fue Vinicius Jr. quien se robó el show. El veloz y desequilibrante atacante anotó el 1-0 en jugada de contragolpe, al minuto 24.
Bayern Múnich sin recompensa
Bayern reaccionó en la segunda mitad y volteó la pizarra con tantos de Leroy Sané y Kane, de penal, al 53 y 57. El club germano, que había sido mejor, parecía tener asegurada la victoria, que le daba una mínima ventaja de cara al duelo definitivo de la eliminatoria, pero uno de sus defensores, el coreano Kim Min Jae, cometió una tonta falta sobre Rodrygo dentro del área y le abrió las puertas al Madrid para que salvase el empate, tras el penalti convertido por Vinicuis, y extendiese a cuatro el número de partidos seguidos sin perder en Múnich.
A todas luces, el equipo de Carlo Ancelotti quedó mejor parado de cara a la vuelta, que será el próximo miércoles (8 de mayo), pues jugará en su campo, el Bernabéu, frente a su público, donde suele hacerse invencible.
Real Madrid procura su final 18 y título 15 en el torneo de clubes estrella de la UEFA.
La otra semifinal tiene como contendientes al PSG y Borussia Dortmund, que juegan la ida este miércoles 1 de mayo, en casa del conjunto alemán, desde las 3:00 p.m, hora de Venezuela.
Por Carlos José Méndez
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