La Federación Alemana ratificó a Joachim Löw en su cargo como entrenador, dos semanas luego de la caída 6-0 ante España por la UEFA Nations League. Una decisión que llama la atención con los resultados que arrastran los teutones en las últimas competencias.
Mientras en Colombia fue despedido Carlos Queiroz por una doble fecha, está el contraste si cruzamos el Atlántico. Media docena recibió Alemania en Sevilla, y ahí se mantiene el líder táctico. Obvio, la diferencia de ciclos, procesos y conquistas es amplia e incomparable.
Löw, de más a menos
Löw es un técnico que le dio alegrías y regularidad a la selección. Eso se ha perdido en los tres más recientes años. Alemania llegó a semifinales en Sudáfrica 2010, salió campeona en Brasil 2014 y estuvo a un paso de las finales en las dos Eurocopas. Esa consistencia en los altos escenarios del fútbol internacional culminó con una consagración en la Copa Confederaciones 2017, donde al mando de un plantel «B», obtuvo el título.
Rusia 2018 era el momento de defender lo alcanzado cuatro años atrás. Un mix de campeones mundiales y los jóvenes destacados en el verano anterior no avanzó de la fase de grupos. Más que decepcionante, para las aspiraciones alemanas.
La Nations League se convirtió en una oportunidad para los países europeos de sumar trofeos a su palmarés, así muchos no estén de acuerdo con su realización, sin embargo, Alemania no clasificó al Final Four en ninguna de las dos ediciones.
¿Qué debía pasar para su destitución?
En cuanto a resultado, pasó todo lo necesario. Es difícil imaginar una realidad aún más negativa que la de los tetracampeones del mundo. Pero, más allá de eso, el manejo de vestuario y la buena relación que tiene con los jugadores, es un factor determinante en su ratificación.
Sí apartó a algunos veteranos para darle renovación al conjunto, Thomas Múller, el más discutido, además del dilema en el arco entre Manuel Neuer y Ter Stegen. Al final, solo el tiempo dirá si este matrimonio ha durado más de lo que debía o si el que viste de negro tiene una bala con la que despedirse a lo grande.
Todos los DT vienen con fecha de vencimiento en un equipo. La de unos es más larga que la de otros. La clave es conocer el momento justo y decir adiós, antes de la nube negra. ¨Mueres como un héroe, o vives lo suficiente para convertirte en un villano», es una frase del Guasón en «Batman: el Caballero de la Noche» que se adapta muy bien al destino de todos los estrategas en el universo del balón. Pocos saben irse en el preciso instante cuando las cosas no van por el camino ideal y eso es algo digno de valorar.
Su contrato finaliza al terminar la EURO 2020. Posiblemente, el cierre de un capítulo en la historia del fútbol alemán.
Escrito por: Santiago Aceituno R/ @SantiAce23
Foto: AS