El ascenso de Leángel Linárez al liderato de la edición 84 de la Vuelta a Portugal se convirtió en un hecho histórico para el ciclismo venezolano, al ser el primer ciclista nacido en nuestro país en calzarse la camiseta amarilla de la que carrera que muchos consideran la cuarta grande del calendario mundial.
Linárez es un corredor que desde chico, en sus tiempos de juvenil, migró desde Barinas a España en busca de oportunidades en el pedalismo europeo. Sus padres tuvieron que vender cinco vacas para costear el pasaje hacia Madrid, reveló la reconocida revista Ciclismo a Fondo, en un trabajo periodístico publicado en 2021.
El venezolano brilló un par de temporadas en el amateurismo español hasta que el Mortagua de Portugal le abrió las puertas de su plantilla como ‘stagiare’, término con el que se conoce a los corredores que son sumados a equipos profesionales en condición de aprendiz.
Linárez, un sprinter puro, convenció al cuerpo técnico del mencionado equipo continental luso con su incuestionable talento y desde entonces milita en aquella escuadra. Hoy, a los 26 años, en madurez deportiva, reporta los resultados para los que el equipo le preparó durante tanto tiempo.
El llanero impuso su potencia en la primera etapa del actual giro luso, disputada el jueves 10 de agosto, y repitió victoria al día siguiente, al superar en el envión final al español Miguel Fernández y al checo Daniel Barbor, para convertirse en el nuevo líder de la clasificación general.
Linárez había llegado a la jornada empatado en tiempo con el local Rafael Reis, pero la bonificación recibida por su triunfo en meta le permitió impulsarse hasta la cima de la tabla principal.
Leángel Linárez superó lo hecho por Etxebarría
Una revisión a los archivos históricos procyclingstats, web de estadísticas relacionadas con el deporte a pedal, permite descubrir que solo siete ciclistas nacidos en Venezuela han tomado la salida en la competencia portuguesa en casi 100 años de historia.
La corrieron Omar Pumar (1997), Unai Etxebarría (1998), Orluis Aular (2021), Edwin Torres (2022), José Bruzual (2022) y Linárez, que está en su tercera incursión (2019, 1020 y 2023).
Antes del par de ganancias firmadas por el de Barinas en recientes fechas, era la actuación de Etxebarría lo más destacado de Venezuela en la cita. Vale señalar que este corredor nació en Caracas, pero desde niño se fue a España (País Vasco), la nación de sus padres. Allí cumplió su formación y desarrolló su carrera como pedalista, siempre con los colores naranja del Euskatel.
25 años atrás, Etxebarría fue una de las figuras en la Vuelta a Portugal. Ganó dos etapas, pero nunca vistió la camiseta de líder. Así que lo de Linárez es inédito y como tal quedará registrado en los libros históricos del deporte nacional.
Ahora bien, el resto del camino en la ronda lusitana de 2023 no favorece a Linárez. Por ello su liderato tiene fecha de vencimiento. Sobran perfiles montañosos dentro de las porciones que vienen y las piernas del venezolano claudicarán.
Puede que en la tercera etapa, este sábado, haya posibilidades de completar el triplete y seguir con la prenda amarilla, pero después tendrá caída libre en el casillero general.
Cualquiera sea su desempeño en lo que falta de competencia, Linárez cumplió su misión y se hizo un lugar en la posteridad.
Por Carlos José Méndez
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