Mick Schumacher es un campeón como su padre. Así lo demostró en su paso por la Fórmula 2. Este domingo, el hijo del ilustre expiloto alemán abrochó el título de la categoría antesala a la máxima competición del automovilismo, a pesar de que en la última carrera del año, el Gran Premio de Sakhir, cruzó muy lejos de los punteros, relegado a la posición 18 y viviendo algunos momentos de angustias en los giros finales.
Para fortuna del joven Schumacher, su principal rival en la lucha por la corona, el británico Callum Illot, tampoco entró en puestos de avanzada y la diferencia entre ambos quedó tal cual como estaba al principio de la última manga de la temporada: 14 puntos (215 contra 201).
Así las cosas, el alemán levantó el trofeo de campeón en su segunda temporada en la F2 y toma un impulso de cara al año entrante, en el que hará su debut en la categoría reina como piloto de la escudería Haas.
Mick Schumacher, un monarca con mucho que mejorar
Eso sí, para algunos críticos, ‘Schumi’ hijo tiene mucho por aprender. Lo señalan como un piloto capaz de lo mejor y lo peor en un mismo fin de semana. Lo sucedido en Bahréin es una muestra de ello. El volante tomó algunas decisiones erradas, más con el corazón que con la razón, y puso en juego su título.
“El alemán, en la primera curva estaba emparejado en paralelo con Ticktum, que se colocó en la primera posición. Ahí, Mick se puso a rebufo del británico y sorprendió con una enorme pasada de frenada con la que estuvo a punto de llevarse puesto a Dan. El hijo del 7 veces campeón iba por el interior del trazado, y en un acto de reflejos, giró hacia el interior para poder esquivar por un pelo el coche del líder de la carrera. Ahí salvó la corona, por milímetros”, reseñó el diario Mundo Deportivo (Barcelona, España).
“Somos campeones y eso es lo que la gente recordará”
Al término de la carrera, Schumacher prefirió centrarse en lo positivo, la consecución de la corona, y no en la discreta carrera de cierre.
“Somos campeones y eso es lo que la gente recordará. Olvidarán esa carrera y verán lo bueno de esta temporada. Y yo también”, indicó el piloto, quien, como es natural, atrae el foco de atención, incluso a nivel del campeonísimo Lewis Hamilton, por ser hijo de una de las leyendas de este deporte.
16 años después del último título de Michael Schumacher –consiguió siete-, un piloto con el reputado apellido volvió a festejar en una pista de carreras. El automovilismo está de fiesta.
Escrito por: Carlos José Méndez / @CarlitosJMendez
Foto: Fórmula 2