Las últimas jornadas del calendario de las Grandes Ligas han dejado un par de momentos que quedarán para el recuerdo de dos peloteros venezolanos. El domingo, Gerardo Parra hizo su retorno a Washington por todo lo alto, con «Baby Shark» sonando en las bocinas internas y el público estremecido. Y este lunes, Elvis Andrus sintió el calor climático, pero más importante aún el humano, del estado de Texas.
Andrus, quien disputó sus primeras 12 temporadas como ligamayorista con los Rangers, regresó al área donde creció como pelotero y como persona, aunque esta vez lo hizo con el uniforme de los Atléticos, divisa que adquirió sus servicios vía cambio a principios de febrero.
«Todo estaba aquí. Mis sueños se hicieron realidad aquí«, le comentó Andrus a MLB.com previo al choque entre Oakland y Texas el lunes. «Tuve a mi primer hijo, asistí a la Serie Mundial, todos esos recuerdos. Es difícil olvidarlo. Este lugar siempre tendrá un puesto en mi corazón. Y estar de vuelta desde el otro lado es algo extraño, pero estoy muy contento con donde estoy en este momento».
El maracayero se estrenó en la gran carpa con los texanos en 2009, cuando apenas tenía 20 años de edad. Esa campaña finalizó segundo en la carrera por el premio al Novato del Año en la Liga Americana y en 2010 obtuvo la primera de dos invitaciones al Juego de Estrellas en su carrera.
Andrus era el último jugador de aquel grupo de los Rangers campeón del joven circuito en 2010 y 2011 que se mantenía con la organización; pero tras una zafra de lesiones y bajo rendimiento el año pasado, el alto mando de Texas anunció que tenían planes de cambiar de torpedero para 2021. Algunas semanas más tarde, el criollo fue enviado en un paquete rumbo a California.
«Era una tortura contra nosotros todo el tiempo», dijo el mánager de los A’s, Bob Melvin, sobre enfrentar a Andrus durante la última década. «Ahora podemos ver la personalidad contagiosa desde nuestro lado, lo que es maravilloso. Podías ver desde lejos como todo el mundo admiraba su liderazgo y su habilidad de jugar todos los días. Elvis tiene mucho para ofrecer y hemos podido apreciarlo», añadió.
Cálida bienvenida:
En su docena de contiendas con los Rangers, Andrus dejó una línea ofensiva de .274/.330/.372, con 303 dobles, 48 triples, 76 jonrones, 893 anotadas, 636 empujadas y 305 bases robadas en 1.652 juegos.
A pesar de que el actual estadio del club se inauguró en su último año con la divisa en 2020, el campocorto no pudo vivir el ambiente del recinto con aficionados presentes debido a las restricciones por la pandemia; sin embargo, una buena porción de las tribunas estaba repleta con fanáticos en su visita el lunes y estos le brindaron una sonora ovación en su primer viaje al cajón de bateo.
«Todo el mundo sabe cuánto me emociono con los aficionados y me nutro de su energía. Estar aquí con fanáticos presentes y demostrando todo su apoyo y cariño, me ha hecho sentir aún mejor«, aseguró el veterano.
El impacto que causó Andrus en su larga estadía en la franquicia no lo sintieron solo aquellos en el dugout o en las tribunas, sino también en lo más alto de las oficinas.
«Traía consigo un gran nivel de energía, sin importar si el equipo estaba en primer lugar o en el último», dijo Jon Daniels, presidente de operaciones de beisbol de los Rangers. «Eso no es fácil de hacer. Sabemos que en la vida, cuando las cosas no están saliendo bien en el trabajo, es sencillo caer en tristeza y amargura. Es humano, tuvo sus momentos, pero en la mayoría del tiempo, llevó su entusiasmo y energía al estadio en cada jornada y era algo contagioso. Muchos equipos talentosos se alimentaron de eso».
Hoy con Oakland, uno de los principales rivales divisionales de Texas, Andrus intenta resurgir como pelotero. Si bien el comienzo fue realmente complejo, las cosas han ido mejorando poco a poco para el venezolano, que siempre verá con buenos ojos un viaje a su primera casa en las Grandes Ligas.
«Solo quería ser recordado como un tipo que entregó todo lo que tenía por la organización. Vine como un chico y salí como un hombre«, explicó Andrus. «Dejé muy buenos recuerdos para esta franquicia. Siempre estuve orgulloso de ser un Ranger de Texas y siempre lo estaré. Creo que eso nunca se irá. Nadie me lo quitará», concluyó.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Atléticos.
