Ronald Acuña Jr. aprovechó otro descuido del lanzador abridor contrario para iniciar un encuentro. Ahora fue Mitch Keller, abridor de los Pirates, que vio al jardinero de los Braves recorrer las bases tras soltar un cuadrangular como el primer bateador de su equipo. Con esa conexión, asaltó el liderato de las Grandes Ligas en el departamento de jonrones.
Pero ya eso dejó de ser una información resalte. Que Acuña suelte un batazo de vuelta entera o que iniciara un compromiso con una conexión que abandonó el parque ya no se puede considerar algo llamativo. Sin embargo, las consecuencias de ese estacazo seguramente sí lo sean.
El patrullero venezolano, que tenía la proyección antes de iniciar la temporada de liderar la Liga Nacional en vuelacercas, llegó a 15 jonrones luego de 42 encuentros disputados. De esta forma, Ronald Acuña Jr. apunta a cerrar la campaña regular con 55 bambinazos si mantiene el ritmo actual.
Luce como una cifra imponente y que cualquier aficionado de los Braves recibiría con los brazos abiertos. Además, es una cantidad que aumentará ese pensamiento de que el criollo es el principal candidato para ganar el Jugador Más Valioso (MVP) de la Liga Nacional y conseguir una de las mejores actuaciones individuales de un pelotero en la historia de las Grandes Ligas.
¿Será posible alcanzar ese número? Son varias las estadísticas que son optimistas al respecto. Acuña golpea la pelota con una contundencia que pocos bateadores de la actualidad se le pueden acercar. Con el decimoquinto vuelacerca de la zafra, en el que nuevamente superó los 400 pies de distancia, es una demostración al respecto. Del mismo modo, la pelota salió de su madero a 108.5 millas por hora, otra prueba de la contundencia que está generando.
Rivales no tienen cómo detener a Ronald Acuña
Los lanzadores de las Grandes Ligas tienen un problema: Ronald Acuña no tiene debilidades actualmente. Si utilizan una recta, muy probablemente la golpee con fuerza. Si es un envío quebrado que termina en la zona, igualmente lo castigará. Ahora si es un pitcheo malo, lo dejará pasar, porque mejoró su identificación de los envíos.
Y es que Ronald Acuña Jr. mejoró su disciplina como bateador y disminuyó la cantidad de ponches. Bien, excelente primer paso para una mejoría sustancial. Ahora, ¿qué sucede cuando los mejores lanzadores del mundo ubican sus pitcheos dentro de la zona de strike? Problemas, muchos problemas para los pitchers.
Esos mismos números que resaltan la capacidad e Acuña para abanicar menos, indican que los resultados son incluso mejores cuando hace contacto. Especialmente con los lanzamientos que terminan en una zona cómoda para golpearlo con fuerza.
Es por eso que continuamente llegó a las bases. Además, en repetidas ocasiones pisó el plato, siendo otro departamento que aspira a liderar durante toda la zafra regular. Actualmente ya pisó el plato en 37 ocasiones, por lo que proyecta cerrar el año con 130.
Pero debido a que Acuña demostró que ya no perseguirá los sliders o las curvas, los serpentineros no los están lanzando con tanta frecuencia. ¿Conclusión? Es un problema enfrentarse a Ronald Acuña Jr. en este momento si eres un pitcher. Incluso uno de los mejores de la actualidad como Max Scherzer o Jacob deGrom.
“Está haciendo un estupendo trabajo en el campo. Parece que debo buscar un nuevo elogio todos los días, porque en cada encuentro hace algo diferente. Si no conecta un batazo, hace una gran jugada en los jardines o con una carrera por las bases. Pocos peloteros tienen las condiciones de este joven”, dijo Brian Snitker, mánager de Atlanta.
Escrito por: César Sequera Ramos |@CesarSequera33
Foto: Atlanta Braves
