Alexi Amarista concluyó recientemente su participación en la Serie del Caribe Mexicali 2025 y en ella demostró su calidad, al erigirse como una de las figuras de Cardenales de Lara, porque bateó .304 e integró el equipo Todos Estrellas de la competición avalada por la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC).
También tuvo un porcentaje de emnasado de .407 y un slugging de 522 en una contienda en la que sacudió siete hits, anotó cuatro carreras y empujó cinco en seis choques. Destacó como bateador a la edad de 35 años y con una estatura de 1.68 metros (m), misma que despertó la desconfianza de algunos cazatalentos sobre su calidad durante su juventud y que, en plena madurez, ratificó que no era algo que le impidiera sobresalir como cañonero.
«Decían que era muy bajito para jugar béisbol (…) pero a veces los jugadores bajitos salen mejor que los altos», declaró en una entrevista concedida el fin de semana a la agencia de noticias EFE antes de partir de México a Venezuela, donde disfrutaría de unos días de vacaciones.
La convicción de Amarista
Amarista, antiguo bigleaaguear y quien reforzó a Lara tras disputar la temporada 2024-2025 de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) con Tigres de Aragua y Bravos de Margarita, está convencido de que la altura de un deportista no debe ser sinónimo de su rendimiento en el mundo de la pelota.
¿El motivo? Piensa que esa teoría carece de veracidad, porque con ella no se podría justificar cómo un beisbolista diminuto, como por ejemplo José Altuve (Astros de Houston), puede tener éxito en la Major League Baseball (MLB), donde el atleta sideral ganó tres títulos de average de la Liga Americana y es un referente ofensivo ya que mantuvo un promedio de .306 en sus primeras 14 campañas.
«La altura no te garantiza ser bueno, sino las ganas que tú tengas y cómo te desenvuelves en el terreno», añadió el anzoatiguense que alcanzó 12 almohadillas en la reciente cita internacional.
Buscará otra meta en 2026
Después de participar en Mexicali 2025, Amarista, apodado «El Pequeño Ninja», tendrá la meta de asistir a Caracas 2026, para llegar a ocho intervenciones en este tipo de eventos.
De lograrlo, emulará lo hecho por luminarias como Francisco Buttó, Ramón Hernández, Luis «Camaleón» García, Urbano Lugo Jr. y Víctor Moreno, quienes ocupan la segunda plaza en presencias de representantes vinotinto en Series del Caribe con ocho. El récord para efectivos nativos lo comparten Antonio Armas y Robert Pérez con presentaciones en nueve certámenes diferentes.
El barcelonés, formado en las filas de la academia Revueltos -afiliada a la Corporación Criollitos de Venezuela-, aspira a cumplir su meta porque disfruta al máximo de este tipo torneos, donde puede toparse con figuras de otras naciones.
«Para mí, jugar una Serie del Caribe siempre es importante porque representa una oportunidad de representar a mi país. Todos venimos por este nombre bien bonito en nuestro pecho que dice Venezuela«, señaló Amarista que en Miami 2024 ayudó a Tiburones de La Guaira a levantar el máximo trofeo de la CBPC.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: Cortesía de Daniel Sosa | Prensa Cardenales de Lara