Si la decisión final estuviera en las manos de Miguel Cabrera, la temporada 2023 transcurriría sin mayor algarabía alrededor de su nombre. Básicamente, sin importar que este año marcará el último de su brillante carrera como ligamayorista, una que con casi toda seguridad lo llevará a convertirse en el segundo pelotero venezolano en ser inmortalizado en el Salón de la Fama.
Pero la realidad es que esa decisión no recae de forma exclusiva en las manos del venezolano y un tour de despedida – o por lo menos algo similar – posiblemente tendrá lugar a lo largo de la venidera campaña, con equipos rivales, además de sus Tigres de Detroit, entregándole regalos y ofreciendo ceremonias de agradecimiento para la carrera de uno de los más grandes toleteros de los últimos tiempos.
«Será bonito si hacen algo y será bonito si no lo hacen también«, le comentó Cabrera al portal oficial de los bengalíes este lunes. «Algunos tipos quieren estar en el centro de todo. Yo no quiero atención. No quiero ninguna distracción para nuestro equipo. Estamos ansiosos de salir y derrotarlos».
En el último año de su contrato por ocho temporadas y 240 millones de dólares, el maracayero oficializó durante la campaña anterior sus intenciones de colgar los «spikes» al culminar la contienda de 2023. Antes de hacerlo, Cabrera se aseguró de cumplir dos de sus grandes metas: alcanzar los 500 cuadrangulares en 2021 y los 3.000 imparables en la zafra anterior.
«No estoy buscando que ellos me den algo, porque ya me dieron varios hits, así que eso es suficiente para mí», señaló el criollo.
Un clubhouse rebelde:
Pero el deseo del 12 veces All-Star de pasar fuera del radar en su campaña final tampoco está siendo escuchado dentro de su propio clubhouse, pues justo después de que terminara su sesión con la prensa, el mánager A.J. Hinch realizó una reunión con sus jugadores en la que mencionó nuevamente al astro aragueño.
«Hablé sobre él en el primer mitin, así que eso debe decirles que no escuché su deseo de que no habláramos de él«, expresó Hinch. «Vamos a disfrutar nuestro tiempo con Miggy. También vamos a dejar que sea un jugador, un contribuyente y que sea él mismo», agregó.
Con esa última parte, el estratega se refiere a que, si bien no dejarán pasar por debajo de la mesa la conclusión de su histórica trayectoria, respetarán la voluntad de Cabrera de mantener el enfoque en ganar de forma colectiva.
«No quiere mucha atención, pero la va a recibir de los fanáticos, de sus compañeros, de la organización. Es su temporada número 21 en las mayores. Pienso que sus contribuciones a los Tigres deben ser celebradas, pero necesitamos dejar que sea él mismo en el campo, dejarlo jugar y no recordarle los últimos 20 años», explicó.
Más allá de tributos o falta de los mismos, Cabrera tiene entre ceja y ceja disfrutar su último año como pelotero profesional. Primero en el Clásico Mundial de Béisbol con Venezuela y luego durante la temporada regular con los Tigres.
«Estoy ansioso por disfrutar esta campaña. Tratar de ayudar a los jóvenes a mejorar este año», indicó el paleador. «Ayudar a que el equipo gane más juegos. Creo que ese es mi enfoque este año. No quiero ninguna distracción, ningún video, nada de eso. No quiero estar en el centro de la atención. Quiero esconderme y tratar de hacer mi trabajo».
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta | @AndresEspinoza
Foto: Cortesía Tigres de Detroit.