La máxima fiesta hípica de los países bañados por las aguas del mar caribe que se celebró el pasado domingo 11 en el Hipódromo La Rinconada registró un rotundo éxito, comparable al de encuentros similares en otras partes del mundo según las mejores casas de apuestas para carreras de caballos. ¿Es acaso una señal de que el hipismo finalmente está retomando el lugar que otrora ocupaba? Al menos es lo que parece.
Tras ocho años de sequía, llega un aguacero
El clásico internacional del Caribe es por mucho la carrera de caballos pura sangre de tres años más importante de toda la región. Se corre todos los años en diciembre en alguno de los países miembros de la Confederación Hípica del Caribe. Aunque en Venezuela el hipismo tradicionalmente ha tenido un lugar muy importante en los corazones de los residentes, y dos de sus hipódromos más importantes habían recibido antes este magno evento, la verdad es que el clásico del caribe no se celebraba en nuestro suelo desde el año 2014. No hubo razones oficiales para la negativa, pero se presume que se debió a la crisis político-económica por la que atravesó Venezuela durante ese periodo.
Por fortuna, 2022 fue un buen año para el hipismo, ya que la CHC decidió que la entrega número 54 del Derby debía correrse en el Hipódromo de La Rinconada, en la ciudad de Caracas, siendo la novena vez que el recinto sirve de sede, y la décima para Venezuela. El resultado no pudo haber sido mejor. Criollos y extranjeros tuvieron la oportunidad de presenciar una carrera completamente emocionante de principio a fin, tal como es costumbre en este tipo de eventos.
Los resultados hablan por sí solos
La población caraqueña acudió en masa al hipódromo de La Rinconada el pasado 11 de Diciembre a disfrutar del Clásico Internacional del Caribe. La ocasión fue propicia y muy jubilosa, pues además se trataba de la primera vez que el recinto hípico habría sus puertas al público desde marzo del 2020, cuando se decretara la cuarentena obligatoria debido a la pandemia del COVID-19. Si bien el Clásico se disputó en la sexta valida, el Derby tuvo varias carreras y diferentes ganadores.
Los hermanos puertorriqueños José Luis Ortiz e Irad Ortiz Jr. fueron los jockeys que más acumularon victorias. El primero totalizó tres, siendo la más destacada el Clásico Confraternidad que ganó montando a El de Froix. Por su parte, su hermano obtuvo 4 victorias, una de las cuales fue en el Clásico Comparación y las otras tres en carreras pertenecientes a la Serie Hípica del Caribe. Finalmente, toda La Rinconada se puso de pié para la carrera principal, a la altura de la sexta válida, donde el ejemplar mexicano llamado Iniesta, montado por Paco López, logró hacerse con el preciado galardón tras recorrer los 1800 metros en 1 minuto 51 segundos con 9 décimas.
El futuro luce alentador
Por supuesto que la representación venezolana también brilló. Por una parte los hermanos Ramón García y Juan Carlos García defendieron su hegemonía en el óvalo de Coche, totalizando 5 triunfos entre ambos. Misael Jaramillo, por su parte, logró 5 victorias, pero en la carrera del Clásico tuvo que conformarse con el segundo lugar. Igualmente, a pesar de que el caballo ganador es mexicano, no podemos dejar de mencionar que su entrenador es el venezolano Óscar González.
Con tan buenos resultados para los connacionales, es de esperarse que el hipismo, uno de los deportes más afectados por la crisis y la pandemia, vuelva a florecer en nuestras fronteras. Después de todo, desde el inicio esa ha sido la intención manifestada tanto por Antonio Álvarez, superintendente de Actividades Hípicas en Venezuela, como por Alberto Paz Rodríguez, presidente de la Confederación Hípica del Caribe. Se estima que a partir de 2023, las carreras dominicales vuelvan a ser la norma y que todos podamos volver a hacer nuestras predicciones deportivas certeras en las válidas. Sin duda alguna, esta ha sido una victoria para el hipismo nacional.
