Mariana Durán fue la tercera espada de la ofensiva venezolana durante la AmeriCup 2023 en la que por tercera vez consiguieron meterse en el Top 6 del continente. Les permitirá disputar dos competencias más este año.
Sobre el transcurrir del torneo, su mejoría en lo personal, el crecimiento del equipo, una remontada épica y lo que les faltó para poder dar dos golpes finales que hubiesen sido históricos la yaracuyana de 30 años explicó lo vivido desde adentro.
El grupo más difícil
La Selección Femenina volvió a clasificar a la cita que reúne lo mejor de América tras lo hecho en el Sudamericano 2022 de San Luis, Argentina. En mayo de este año se dieron a conocer los cruces, y Venezuela terminó cayendo en el Grupo A, que tuvo al rival más difícil de cada peldaño del sorteo sin objeción alguna en la previa: Estados Unidos (sobre Canadá), Brasil (sobre Puerto Rico), Argentina (sobre Colombia) y Cuba (sobre Dominicana).
De entrada, reformuló las expectativas del elenco nacional. «Ya cuando nos concentramos nos habíamos planteado que el partido más importante era contra Cuba. Lo que no sabíamos era que íbamos a tener tan buenos partidos (USA y Brasil). Nadie se esperaba. Y con dos pívots prácticamente porque nos faltaron Odeth (Betancourt) y Nohelia (Chile). Después lo hablábamos, de cómo hubiesen sido esos partidos con ayuda abajo», explicó la puesto uno de altura con «corazón de 5».
Tras un partido en el que ganaron el último cuarto por doble dígito (24-14) y redujeron el global final (80-54) frente a las norteamericanas salieron reconvertidas: «Después nos lo empezamos a creer más. Quizás eso nos pasó en torneo anteriores, que no estábamos creyendo en lo que podíamos hacer».
Mejora individual para Mariana Durán
Si bien no siempre se pueden medir las actuaciones de los jugadores en números, la mejoría y protagonismo dentro del equipo que tuvo Durán de un año a otro es palpable. Registró sus mejores promedios de puntos (13.0pp), rebotes (4.0), asistencias (3.4) y valoración (14.0) desde que debutó con la Selección Absoluta en el Sudamericano de Santiago 2010.
Fue tercera del torneo en robos (2.4) detrás de sus compañeras Wallen y Pérez, y lideró al certamen en porcentaje de tiros libres (94.4%). Además, resultó octava en valoración (14.0). En esta oportunidad estableció su marca personal anotadora vistiendo la elástica vinotinto/morada metiendo 24 tantos y creciéndose en un escenario digno de la ocasión: cuartos de final frente a Puerto Rico, una de las potencias latinoamericanas.
Entre los cambios que surtieron efecto desde la última vez que representó al país 10 meses atrás sobre suelo argentino, dijo: «Trabajé mucho mi físico. Me siento una jugadora mucho más madura que en años anteriores. El año pasado el torneo fue bueno dentro de todo, pero en este estaba mentalmente por completo. Sabía mi rol y lo que tenía que hacer».
Esto en un año que definió como de altos y bajos debido a que sufrió dos desgarres en la fascia plantar de su pie, y siendo su cuarta campaña en la Serie B de Italia, en la que llegó a la final de su región con un «game winner» incluido para clasificar a la definición. Acerca de la lesión, aplaudió lo realizado por el equipo de fisioterapeutas de la Selección, ya que había llegado a la concentración con dolor y jugó el certamen sin problemas.
Remontada ante Cuba
Tras dos caídas ante los favoritos del grupo de las que habían salido con buena cara, incluso llegando solo cinco abajo al último cuarto con Brasil, a la postre campeona, tocaba el partido que vinieron a buscar. Pero no fue como esperaban. Se vieron superadas por dos cuartos consecutivos (segundo y tercero) y restando seis minutos estaban 20 puntos por debajo en la pizarra (72-52).
En esos hechos del deporte que a veces resultan hasta difíciles de explicar, lograron empatar el juego con una férrea defensa toda la cancha que produjo incontables recuperaciones y bandejas para llevar el encuentro a tiempo extra.
«Siempre pensábamos en remontarlo. Todas teníamos una urgencia de defender. Hicimos sufrir a muchos porque esa urgencia llegó un poco tarde. Creo que los partidos anteriores nos habían pasado algo de factura -era el tercero consecutivo en tres días-. Nosotras solo pensábamos en ganar. Cuando tienes esas ganas sales a comerte la cancha y dejar todo. Nuestra objetivo era ganarle a Cuba y si no lo hacíamos estábamos en una posición mala», describió.
Con un suplementario en el que mantuvieron la intensidad y sacaron de la cancha a las antillanas 30-9 lograron la primera victoria frente al combinado cubano en la AmeriCup, habiendo caído en los dos duelos previos (2009 y 2013). Del «overtime», redondeó: «Retomamos ese ritmo de juego que habíamos tenido contra Estados Unidos y Brasil que era lo que nos faltaba ahí. Después de esa remontada ir a tiempo extra te carga de energía, adrenalina, y vas para encima».
Argentina, Puerto Rico y la celebración de una doble-clasificación
-Entraron al partido con Argentina sabiendo que con perder por 12 alcanzaba para clasificar de terceras. ¿Cuánto hablaron eso? ¿Cómo lo encararon?
-Es imposible no sacar cuentas. Pero considero que tenemos la suficiente madurez para sacar esas cuentas y salir a jugar igual. Pienso que en todo torneo tienes un partido malo, y el nuestro fue ese con Argentina. Jugando mal perdimos por dos puntos. Nos dimos cuenta de que si hubiésemos hecho nuestro partido lo hubiésemos ganado. Como llevamos mucho tiempo que no nos pasaban esas situaciones quizás no supimos cerrar los partidos.
-Habían sido el equipo con menos pérdidas de toda la fase de grupos (13.0pp) y contra Puerto Rico cometieron 29. ¿Qué crees que pasó?
-En todos los partidos anteriores estábamos haciendo muchos puntos en contraataques y con defensa en media cancha. Puerto Rico nos marcó zona. Obviamente nos iba a regalar el tiro de 3 con los porcentajes que estábamos teniendo (22.3%, el segundo peor de la fase de grupos), era lógico. Encontrarnos en esa situación nos hizo forzar muchas cosas y de ahí las pérdidas. Menos mal empezaron a caer los triples (41.9% ese día) porque sino hubiéramos estado en problemas.
-Pusiste tu máxima personal con la Selección (24pts) en un partido contra jugadoras que venían de disputar un Mundial (2022), Juegos Olímpicos (2021) y tres títulos de Centrobaskets. ¿Cómo afrontaste ese escenario?
-Yo entré tranquila. Entré sin expectativas de nada, a jugar el partido. Tenía la confianza en ese tiro de 3. Sabía que uno o dos iba a meter. No sabía que iban a ser 3 seguidos e iniciar el tercer cuarto con otro. Me estaban dando el espacio y los seguí tomando.
-Capaz eres la que ve menos básquet del equipo -compartido en un video de las redes de Femenino FVB- pero igual sabías a quiénes tenías enfrente.
-Voy a aclarar eso jajaja… es verdad, no veo básquet. Pero lo sigo mucho. Me informo, sé donde juegan. De esas cosas sí soy una nerd, pero no lo veo. Sabíamos qué teníamos enfrente. Que teníamos que marcar a (Arella) Guirantes que era la bujía principal, la que movía las cuerdas, resolvía todas las situaciones. Hicimos lo posible pero es súper talentosa, no por nada juega Euroliga y WNBA. También algunas aparecieron que no estaban en nuestros cálculos. Al final hicimos los ajustes.
-Sufrida derrota por haberlo tenido ahí. Pero dos horas más tarde vino otro partido importante y que no jugaban ustedes, Canadá-Argentina. ¿Lo vieron juntas?
-Sii, habíamos salido y estábamos en el centro comercial. Lo puse en el teléfono. Vimos que el partido iba punto a punto y empezamos a celebrar cuando ganó Canadá en medio del H&M… la gente nos miraba porque estábamos súper emocionadas porque sabíamos que volvíamos a los Panamericanos.
-El de Brasil -con México- era un poco más lógico el resultado… (sellaba el cupo al Preclasificatorio Olímpico de América)
-Lo celebramos igual. De hecho llamaron a la habitación del hotel para que hiciéramos silencio porque estábamos muy contentas. De todo el trabajo que veníamos haciendo, se están viendo los resultados ahorita.
-Desde aquella derrota en 2018 con Paraguay que las dejó afuera de todo por 3 años, volvieron en 2021 y dos años más tarde van a jugar un Preclasificatorio Olímpico con lo mejor de la región. ¿Cómo lo ven?
-Entre nosotras hablamos mucho de eso. Se ve otro equipo de lo que era en San Luis a lo que somos hoy. Se ve que estamos jugando mucho mejor, más ordenado, obviamente hay ciertas cosas que debemos mejorar.
-Ahora entran ustedes a este sistema de ventanas mientras están con sus clubes… ¿Ya han empezado a ver cómo será la logística?
-Cuando supimos que estábamos pasando de terceras ya empezamos a sacar cuentas, que teníamos que hablar con los agentes, los clubes, porque tenemos que ir. Tenemos hambre de representar a nuestro país porque sentimos muchísimo la camiseta y queremos seguir haciendo estos buenos papeles.
Ya son cosas que hay que ir hablando con los clubes. Las que jugamos por fuera llegaríamos quizás unos diez días antes. No estaríamos tanto tiempo con las que están en Venezuela, pero igual haríamos la preparación.
Se viene el quinto año en Serie B para Mariana Durán
-Fuiste anunciada por tu nuevo club en Italia (Bolzano, recién descendido a Serie B). ¿Qué te llevó a unirte a ellos?
-El año pasado me lo tomé tipo “relax”. Quería un equipo mucho más tranquilo, que fuera competitivo pero que me diera más espacio. En Roseto era una sociedad muy absorbente. Me afectó mucho mentalmente. Por eso decidí ir a Senigallia. Este año como me sentí mejor, me fue súper bien, decidí ir a uno con una estructura más fuerte y que quisiera salir en Serie A.
Entonces busqué uno más fuerte y en una región más competitiva. Por eso voy a el norte de Italia, que el básquet es mucho más fuerte que en el sur o en el centro. Tengo el pasaporte europeo pero para mí es súper complicado jugar Serie A porque buscan a las puesto 5 (a pesar de tener el pasaporte juega como extranjera). Yo soy 5 de corazón, no de tamaño.
-En España si podrías jugar como española, ¿no?
Sí, pero siento que el básquet italiano me ha ayudado mucho a dar esos pasos, he madurado mucho mi básquet y creo que puedo seguir jugando ahí y en algún momento daré el salto. Tal vez después de este año que es una región más competitiva, que me pueden ver más. Estoy confiando en el proceso. Sé que puedo jugar en Serie A, que lo puedo hacer bien. Cuando toque, toque.
-Llevas 13 años con la Selección. ¿En qué lugar pones este torneo durante este trayecto?
-Yo lo pondría en un Top 3. Creo que después de ser medallista sudamericana (plata en Barquisimeto 2016) y jugar un Preolímpico (2016) viene esto.
Escrito por: Santiago Aceituno R / @SantiAce23
Foto: FIBA
