Los Tiburones de La Guaira y las Águilas del Zulia han estado en el sótano de sus respectivas divisiones durante la mayor parte de la temporada 2020-2021. Hasta hace no mucho, ambas divisas eran las únicas con 10 victorias o menos, y sus aspiraciones clasificatorias parecían incluso fuera del alcance de un milagro navideño o de año nuevo.
Si bien la recta final de diciembre no le hizo el favor a los salados, la divisa zuliana sí que estaba en la lista de bien portados de Papá Noel, pues el repunte de los dirigidos por Rouglas Odor ha sido tan real como su opción actual de colarse a la fiesta de enero en la presente campaña.
Mientras Tiburones continúa sin registrar doble dígito en el renglón de victorias y luce cada vez más acomodado en el último puesto de la tabla en la división central, las Águilas han tomado un segundo aire justo en el momento indicado. Los rapaces inaugurarán su calendario de enero con balance en .500 (15 ganados y 15 derrotas), gracias a una racha que los vio triunfar en ocho de sus últimos 10 encuentros del recién culminado año.
La escuadra aguilucha estaba a dos juegos y medio del líder Bravos antes de la jornada de este sábado, y a solo un par de desafíos de distancia de Cardenales y Navegantes, que se compartían el segundo lugar de la tabla, último que da boleto para la postemporada.
La ubicación geográfica le está saliendo cara a las Águilas
El principal obstáculo del Zulia para estar mejor posicionado en la actualidad ha sido pertenecer a la división occidental, que ha sido por mucho la más competitiva de todo el circuito en el presente torneo. Sin duda las Águilas son el conjunto más caliente del momento, pero no han ganado tanto terreno como esperaban gracias a que el resto de las novenas que completan su grupo, también han jugado para un balance de .500 o más en sus 10 cotejos más recientes.
Por el contrario, en la división central, Caribes, Leones, Tigres y Tiburones jugaron para récord negativo de 4-6 en su última decena de compromisos; de hecho, mientras los cuatro conjuntos occidentales arrancaron el 2021 con balances nivelados o positivos, solo los indígenas pueden alardear de lo mismo en el centro.
La tropa rapaz tenía hasta la mañana de este sábado el quinto mejor porcentaje de ganados y perdidos del torneo, por lo que si hacemos el juego mental de mudarla de división, se ubicaría en puestos clasificatorios como escudero de Anzoátegui en el centro.
Para las Águilas será de vital importancia sacar provecho de sus primeros tres juegos del presente mes, todos contra unos Tiburones que son ampliamente reconocidos como el conjunto más débil del presente campeonato. Después de ese trío de choques contra los litoralenses, la ruta se complica con siete encuentros restantes ante rivales que actualmente juegan con balances positivos, tales como Magallanes (tres choques), Bravos (dos) y Caribes (dos)
El escuadrón comandado por el líder bate del torneo, Alí Castillo, perdió tres de sus primeros cinco encuentro ante los turcos, mientras que también estaba por debajo en la serie particular frente a los isleños (2-4) y los aborígenes (0-2) Por su parte, salieron victoriosos en su único careo con los escualos el año pasado.
Escrito por: Andrés Espinoza Anchieta / @AndresEspinoza
Foto: Águilas