Si algo ha abundado durante los primeros dÃas de los Spring Training de las Grandes Ligas han sido los innumerables interrogatorios por parte de los medios para con los jugadores sobre el tema más impactante en la actualidad del béisbol, como lo es el esquema del robo de señas con ayuda de la tecnologÃa que llevaron a cabo los Astros de Houston en 2017.
En consecuencia, los peloteros con mayor estatus en la liga son los primeros en ser cuestionados acerca de la polémica y aunque hubo varios de ellos que fijaron su posición repudiando el hecho, como lo hicieron Cody Bellinger y Mike Trout, el venezolano Miguel Cabrera prefirió “no hacer leñas del árbol caÃdoâ€.
Cabrera no quiso hablar del caso
Cabrera, quien el lunes se presentó a los campos de entrenamiento de los Tigres de Detroit, en Lakeland, Florida, no quiso ahondar sobre la situación que atraviesa el equipo sideral y al ser preguntado al respecto, de acuerdo con el periodista Evan Woodbery, solo se limitó a responder: «Â¿Qué puedo decir? Eso es asunto de ellos. No puedo decir mucho».
Cabrera optó por vÃa salomónica de deslindarse totalmente del caso, tal parece, como un acto de solidaridad con su paisano y amigo José Altuve, uno de los principales señalados en la deplorable situación.
El hasta ahora último grandeliga en triple coronarse durante una temporada, tampoco quiere ser parte de las matrices de opiniones que se han generado desde principios de enero y por el contrario, enfocarse el cien por ciento en terminar de acondicionar su fÃsico para retomar el ritmo ofensivo que lo ha caracterizado a lo largo de su carrera.
Objetivos en la mira para Cabrera
Miguel Cabrera llegó a los entrenamientos primaverales con menos masa corporal de la que exhibió durante la contienda 2019 y que de alguna manera le afectó en su rendimiento al terminar con números muy por debajo de los que acostumbró.
Según sus propias palabras, durante el invierno se sometió a una dieta estricta que lo ayudó a perder una cantidad de peso considerable, que incluso se puede apreciar a simple vista y que tiene lleno de optimismo a la plana mayor del conjunto bengalÃ.
Al toletero de 36 años de edad le resulta imperante alcanzar el tope de sus condiciones. Pues la del 2020 se vislumbra como una campaña histórica dado que está cerca de alcanzar distintas cifras redondas en los departamentos ofensivos que sin dudas lo ayudarán a afianzar su candidatura para convertirse en otro venezolano integrante del Salón de la Fama de Cooperstown.
«Siempre siento que tengo que demostrar algo en el campo. Espero que este año pueda hacer un mejor trabajo que el año pasado», le dijo el aragüeño a Woodbery una vez culminada su primera sesión de prácticas de la pretemporada.
Entre los récords personales que tiene en la mira Cabrera, sobresale el de los 500 jonrones, que de mantenerse saludable puede alcanzar en el torneo que está por iniciar al llegar al mismo con 477. Es decir con 23 tablazos más de vuelta entera puede darle alcance a la histórica cantidad.
Otras metas para el venezolano
Asimismo, lucen asequible también las 1.700 carreras impulsadas, las 1.500 anotadas y los 600 dobles y un poco menos factible al menos para este campeonato, los 3.00 hits.
Con todas estas metas en mente, Cabrera tiene suficiente trabajo durante la primavera como para dedicarle tiempo valioso y distraerse con una situación externa y ajena para él, como lo es el de la organización de Houston.
Escrito por: Redacción Sports Venezuela
Foto: MLB.COM
