Lejos de la presión por superar récords históricos, el mejor Miguel Cabrera apareció. El primera base de los Detroit Tigers cerró la séptima semana de la temporada regular de las Grandes Ligas como el venezolano con mejor rendimiento y con razones para pensar que recuperó esa potencia con el madero que había perdido.
Cabrera ligó para .345 producto de los 11 inatrapables que soltó en los 26 turnos al bate de los últimos siete juegos. Durante ese transcurso conectó dos cuadrangulares, un par de dobles y negoció un boleto. Con esa línea, Miguel Cabrera cerró con el tercer mejor OPS de las Grandes Ligas con 1.160, solamente detrás de Bryce Harper (1.904) y Shohei Ohtani (1.215).
Parte de esa alza en la producción ofensiva se debe a la recuperación del poder del venezolano. En la pasada semana Cabrera conectó hasta siete pelotas con una velocidad de salida de 100 o más millas por hora. De hecho, promedió 92.2 para terminar entre los 50 mejores bateadores de los más recientes siete días.
Asimismo, decidió modificar su swing e intentar elevar más sus batazos. Luego de que en la zafra promediara un bajo 9.9° de ángulo, en sus últimos siete encuentros pasó a 18.2°, razón por lo que los extrabases comenzaron a aparecer con más continuidad.
“Hemos visto a Miguel pasar a un montón de jugadores distintos. Es increíble ver la historia que está haciendo. Yo sé que a largo plazo esta hazaña significará mucho para él, porque siempre que te mencionan junto a Mr. Tiger (apodo de Kaline), tiene que darle una muy buena sensación”, señaló Hinch a LasMayores.com.
Otra semana histórica para Miguel Cabrera
Para Hinch, Cabrera es un legítimo candidato al Salón de la Fama de la MLB porque es un atleta que a lo largo de 20 certámenes mezcló, a la perfección, la fuerza y habilidad con el madero, pues conectó 1.119 extrabases en sus primeros 2.608 topes.
“Cabrera está consumiendo excelentes turnos y haciendo muy buenos swings. Se está poniendo en conteos de bateadores. No está tratando de hacer mucho, sólo hace todo lo que le podemos pedir a nuestros toleteros que hagan para ser exitosos”.
Miguel Cabrera sacó a relucir su fuerza en la jornada dominical de la Major League Baseball (MLB) y gracias a eso anexó una proeza más a su currículo, porque llegó a 505 jonrones se convirtió en el vigésimo cuarto atleta con más cuadrangulares en la historia del circuito.
En el segundo inning y con dos outs, el bateador designado empalmó un vuelacercas solitario en el Comerica Park, donde ayudó a Tigres de Detroit a imponerse como local 5-1 sobre Orioles de Baltimore, para completar una barrida en la serie de tres juegos entre clubes de la Liga Americana. Le sacó la bola a Tyler Wells, abridor oropéndola.
Gracias a ese batazo de cuatro esquinas, su tercero de la temporada 2022, el slugger aragüeño rompió la paridad que tenía con Eddie Murray, quien acumuló 504 bambinazos en su trayectoria en Las Mayores y ahora es el dueño del peldaño 25 del rubro ofensivo que es liderado por Barry Bonds con 762 pelotas depositadas en las gradas.
Cabrera, de 39 años, también disparó un sencillo en el duelo de ronda eliminatoria. Aumentó de 3.018 a 3.020 su total de indiscutibles de por vida. Con esa cantidad de incogibles igualó a Rafael Palmeiro en la casilla 29 del listado de mejores hiteadores, comandado por Pete Rose con 4.256 «batazos sin enemigos».
Escrito por: César Sequera Ramos | @CesarSequera11
Foto: Detroit Tigers