Luis Sardiñas sobresalió a nivel ofensivo en la Gran Final de la temporada 2020-2021 de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP) y por eso se alzó con el premio Jugador Más Valioso (JMV) de la etapa.
Para el campocorto, de 27 años, el contacto representó su carta de presentación en una serie de playoff en la que Caribes de Anzoátegui barrió 4-0 a Cardenales de Lara para coronarse. Promedió un elevado .412 al irse de 17-7. Pegó un doble, empujó dos carreras y anotó tres.
Tras recibir el JMV de la instancia decisiva, por parte de Robert Pérez, el bolivarense reconoció que el galardón fue producto de su esfuerzo y la ayuda de Dios. Le dedicó su éxito a la familia, porque le brindó su apoyo incondicional durante toda la campaña.
“Tanto el título como el premio JMV se los dedico a mi familia, cuya gran mayoría se encuentra en Estados Unidos. Ellos me motivaron a ser mejor en el terreno. Todos me dieron la fuerza para estar aquí y contribuir a la consagración de Caribes”, señaló Sardiñas a TLT.
Sardiñas analizó la Gran Final
Para el torpedero, que habló tras el cuarto choque disputado en el estadio José Pérez Colmenares de Maracay, el momento clave de la confrontación por el gallardete se presentó en el segundo tope, en el que fue protagonista.
Ese desafío se disputó el 23 de enero y finalizó 1-0 a favor de Anzoátegui. La única carrera que se produjo en un cotejo definido en 11 entradas la remolcó el infielder de Upata con un sencillo en la parte alta del acto.
Cree que ese partido marcó toda la llave porque La Maquinaria Indígena salió airosa en un auténtico duelo de pitcheo, algo que demostró que estaba enfocada en titularse.
“Definitivamente, el segundo juego cambió la serie. Me concentré en conectar a la pelota con fuerza para traer al plato la rayita del gane. Quedamos en buena posición y no la desperdiciamos. En la final, me enfoqué en demostrar que podía tomar turnos de calidad”.
Un hombre taciturno
Sardiñas conversó con el periodista Manuel Rodríguez, de TLT, y le dejó claro que no es un hombre que se dedique a hablar sobre sus virtudes. Más bien prefiere que sean sus actuaciones sobre el diamante las que lo definan como atleta.
“Soy alguien de pocas palabras y mi única intención fue ayudar al equipo. Le dedico este triunfo a mi hijo, a la afición de Puerto La Cruz y a la de todo el oriente del país que no pudo celebrar aquí en Maracay con nosotros por causa de la pandemia de coronavirus. Este éxito es de ustedes”.
El shortstop, que no pudo contener las lágrimas producto de la emoción, dejó porcentajes de embasado (OBP), almohadillas alcanzadas (slugging) y OPS (suma de los dos renglones anteriores) de .444, .471 y .915, respectivamente, en la finalísima.
Ahora tratará de extender su éxito individual al plano internacional, pues desde el domingo intentará colaborar con la causa de un combinado aborigen que buscará consagrarse en la Serie del Caribe 2021, que se disputará en Mazatlán, México.
Escrito por: Joseph Ñambre | Twitter: @JosephSports27
Foto: Prensa Empresas Polar
