Luis Arráez debutó con los Marlins de Miami como primer bate, y lo hizo demostrando lo que es capaz de hacer.
Fue el encargado de abrir la temporada de los peces con un imparable al jardín izquierdo, y cerró su jornada inaugural bateando de 4-2, incluyendo su primer extrabase, un doble entre el jardín derecho y el central, y una carrera empujada.
Además, anotó con el jonrón de Garrett Cooper que empató las acciones en la parte baja del sexto, el único episodio en el que los Marlins pudieron hacerle daño a Max Scherzer y el pitcheo de los Mets.
En el Opening Day de 2023 Arráez bateó dos de los cinco imparables de su equipo. Soler y Stallings también conectaron dobles, y Cooper dio el batazos más importante del rally.
De resto, los Marlins volvieron a ser un reflejo de lo que han sido en las últimas temporadas. 12 ponches, apenas dos bases por bolas, y esos cinco hits.
Esto apenas comienza, y la tarea será ardua para Arráez y compañía.
Arráez está listo para batear en el orden que sea
Ya lo demostró con los Mellizos de Minnesota, con Venezuela en el Clásico Mundial, y ahora lo hará con los Marlins de Miami.
Luis Arráez batea, y lo hace en cualquiera que sea el orden al bate.
Con nuestra selección, lo hizo como segundo y como tercero. Los Marlins, le piden algo distinto.
Que sea el catalizador de una ofensiva que viene teniendo muchos problemas para producir carreras en los últimos años.
Pudimos conversar con Arráez antes del duelo de hoy para saber cómo se sentía con el hecho de ser el primer bate del equipo, su relación con Pablo López y lo que significa volver a jugar en el loanDepot park tras lo que pudo lograr con Venezuela en el Clásico Mundial de Beisbol.
Hoy Arráez dio la primera muestra de lo mucho que puede hacer, pero también se demostró que va a necesitar más ayuda.
Con un Sandy Alcántara que no estuvo en su mejor versión, los Marlins necesitarán más de su ofensiva.
Esperemos que Luis sea quien encienda esa chispa…
Por Alejandro Villegas | @Alejandrovg32