El segunda base venezolano Luis Arráez no es un bateador de fuerza y por esa razón, cada vez que conecta jonrones los disfruta al máximo, tal y como hizo el sábado cuando despachó su tercer cuadrangular de la temporada 2023, y primero en casa, para colaborar con la victoria 4-3 de Marlins de Miami sobre Piratas de Pittsburgh.
Conectar su primer vuelacercas en el loanDepot Park con la franela de la escuadra de Florida le generó mucha felicidad al infielder, porque pudo celebrarlo frente a los 24.688 fanáticos que asistieron al choque de la Major League Baseball (MLB).
«Hoy (sábado) era un buen día para pegar un jonrón porque vi a ese montón de fanaticos, entre ellos muchos boricuas, que nos vinieron a respaldar y eso me emocionó bastante. Fue una manera de responderles por el cariño que nos han dado en esta temporada», señaló Arráez en entrevista concedida a Alejandro Villegas, corresponsal y coordinador de Sports Venezuela en Estados Unidos.
Un momento dulce para Arráez
Arráez, quien hace méritos para asistir al Juego de Estrellas que se disputará el 11 de julio en el T-Mobile Park de Seattle, atraviesa un dulce momento con el madero. Terminó de 3-1 con un anotada y dos empujadas, para dejar su average en un astronómico .401, el más alto de la Liga Nacional y de todas Las Mayores.
Su único inatrapable fue el bambinazo que le sonó al dominicano Osvaldo Bido en el quinto inning, sin outs y un corredor en circulación, algo que según él recordará por el resto del curso pues le permitió mostrar su fuerza a los fans de los peces. Aseguró por eso celebró su palazo de forma muy efusiva.
«Estoy gozando mi buen momento y por eso celebré al máximo. No es para faltarle el respeto a nadie, sino simplemente una manera de festejar lo que hice delante de todos los fanáticos de un estadio que estaba lleno casi lleno. Tenía que disfrutarlo».
El enfoque del astro de Miami
Para Arráez, quien con 110 hits sacudidos encabeza a los toleteros del Big Show, mejorar es su principal prioridad pues aspira a ser merecedor tanto de un Guante de Oro como de un Bate de Plata y lo deja claro.
«Yo trabajo todos los días para mejorar mi defensa e incrementar la confianza en cada una de las cosas que hago. He venido trabajando 24/7 (24 horas durante los siete días de la semana) en el aspecto defensivo, porque quiero que se me reconozca como un buen camarero, pero lo hago sin descuidar mi ofensiva que es mi aspecto más fuerte. La idea es ser un beisbolista más completo».
El beisbolista, nacido en San Felipe hace 26 años, se siente contento por formar parte de Marlins, que ocupa la segunda casilla de la División Este de la Liga Nacional con un récord de 44-34 y apunta a participar en postemporada por primera vez desde 2020, algo que ilusiona al máximo a sus seguidores con la obtención de un título de Serie Mundial que la novena no consigue desde 2003, cuando alzó el segundo y último trofeo de su historia.
«El apoyo de los fanaticos es algo que en lo personal agradezco. Miami va para arriba y prometo que seguiremos jugando buena pelota, para estar en la parte alta de la tabla».
Escrito por: Joseph Ñambre | Twitter: @JosephSports27
Foto: Prensa Marlins de Miami
