Emotiva. Así fue la ceremonia dominical que marcó la meritoria exaltación del lanzador Johan Santana y el jardinero/antesalista Melvin Mora al Salón de la Fama del Béisbol Venezolano, donde están las luminarias de distintas épocas que brillaron tanto en el circuito invernal patrio (LVBP) como el torneos del exterior, especialmente la Major League Baseball (MLB).
El dúo, que forma parte de la Clase 2022, trabajó en la LVBP para Navegantes del Magallanes y durante una ceremonia dejaron claro que siempre se sentirán parte de la familia bucanera, porque formaron parte de un club muy popular.
Del par Santana fue el primero que dio a conocer la sensación de estar en un espacio destinado exclusivamente para grandes leyendas nacionales de la pelota.
“El béisbol es un lenguaje universal, porque el deporte nos une. Para mí es un gran honor ser venezolano, porque cuando yo tomaba el terreno no pensaba sólo en mí y en mi familia, también pensaba en Venezuela, porque sabía la oportunidad que tenía en frente. Creo que no los defraudé, lo hice lo mejor que pude, pero lamentablemente las lesiones no me dejaron seguir. Tengan la plena seguridad de que cada vez que yo salía al terreno lo hacía con orgullo y responsabilidad”, dijo Santana al periodista José Ángel Rodríguez, de LVBP.com, durante una ceremonia realizada en el Centro Comercial Sambil de Valencia en la que también estuvo presente Raúl Zambrano, reportero de Sports Venezuela.
Más palabras de Santana
Santana, ganador de dos premios Cy Young de la Liga Americana y quien lanzó un no hitter con Mets de Nueva York en 2012, piensa que cumplió una buena labor en MLB porque puso a Venezuela en la palestra deportiva universal.
«A través del tiempo, uno intenta ser un ejemplo para nuestras familias. Me pongo emocional, porque no todos los días se tiene la oportunidad de estar frente a todos ustedes, y mucho menos, de ser exaltado al Salón de la Fama. Siéntanse orgullosos, porque también es de ustedes (los amantes del béisbol). A Venezuela, hay que saludarla, además de respetar sus valores y principios está la grandeza de los hombres”, agregó.
Santana, apodado El Gocho, dejó una marca vitalicia de 139-78 en 12 torneos de MLB, donde también sumó 1.988 ponches y apenas 567 bases por bolas en 360 apariciones, 284 como abridor.
El currículo de Mora
Mora, quien como outfielder ganó notoriedad al atrapar un batazo de Omar Vizquel en en el sexto tope de la Gran Final de la LVBP de la campaña 1993-1994, se siente muy alegre de estar en el panteón de las luminarias patrias.
Este toletero, que en la MLB ligó 1.503 indiscutibles en 13 justas y fue convocado a un par de Juegos de Estrellas, se siente muy feliz por ser escogido para estar en un recinto sacrosanto y espera que surjan nuevos cazatalentos como Andrés Reiner, ojeador de Astros de Houston, que abrió la compuerta para la masiva entrada de criollos.
“El señor Andrés Reiner es una de las personas que significó mucho para nosotros. Era un segundo papá, e incluso, para algunos, un primer padre, porque él aguantó todas nuestras malacrianzas. Para mí, estar hablando de él representa un orgullo. Cuando fui exaltado al Salón de la Fama de Baltimore, él me dijo unas palabras: ‘El que menos pensé que iba a llegar primero a un Salón de la Fama fue quien lo hizo primero. Ahora sí puedo morir en paz’ (…) Me marcó para siempre. Andrés Reiner veía todo más allá de la pelota. Todos, como Johan Santana, Bob Abreu, Richard Hidalgo, Carlos Guillén, Freddy García y hasta Magglio Ordoñez nos sentimos agradecidos de que ese señor se haya cruzado en nuestras vidas”, declaró.
Escrito por: Joseph Ñambre | Cuenta de X: @JosephSports27
Foto: Prensa LVBP
